Uruguay busca ampliar ventas de carne aviar hacia Venezuela

La misión empresarial partirá el próximo martes.

Un grupo de industriales, representantes de las principales empresas del sector avícola, viajará el martes hacia Venezuela con el fin de negociar un aumento en las exportaciones de carne aviar, tanto para 2013 como para 2014.

Los empresarios fueron informados por los importadores venezolanos que se pretende ampliar el número de toneladas de carne aviar importadas que se habían acordado con las empresas de Uruguay.

Sin contar a la compañía Tres Arroyos, instalada en el país y de origen argentino, quien negocia directamente desde su casa matriz en ese país, el resto de las empresas acordaron la exportación de 5.000 toneladas para el 2013 y 10.000 para el 2014. La venta de carne de pollo hacia ese país fue de 3.000 toneladas durante el año pasado, según informó el secretario de la Cámara Uruguaya de Procesadores Avícolas (Cupra), Carlos Steiner. El empresario manifestó que las ventas de Tres Arroyos durante el año pasado rondaron las 15.000 toneladas.

“Aún no sabemos cuánto será el aumento en la demanda, ni tampoco si podremos hacer frente al mismo. El consumo de pollo en Venezuela es muy alto. En ese país se consumen 40 kilos anuales por habitante, es decir unos 1,2 millones de toneladas por año”, indicó el representante de las industrias avícolas uruguayas.

 

En la actualidad Uruguay exporta pollo hacia ese destino a razón -según el negocio- de unos US$ 2.400 por tonelada, por lo que es con mucha diferencia el mercado habilitado que más paga. Otros destinos, a los que se ha tenido que redirigir las ventas cuando este país se ha cerrado transitoriamente, pagan entre US$ 1.800 y US$ 1.900 por tonelada.

Si bien Argentina y Brasil son fuertes competidores en Venezuela, estos ingresan a precios algo menores. “Desde ese país nos manifestaron que están muy conformes con lo que enviamos desde aquí, debido a que la calidad de la carne de pollo uruguaya, de acuerdo con estudios que han hecho, es muy buena”, sostuvo Steiner.

La operación se realizaría hacia un solo comprador privado, la cadena de supermercados CASA. La posible ampliación en la producción no sería un obstáculo a nivel local, ya que la capacidad infraestructural instalada es sensiblemente mayor a lo que se produce en la actualidad.

El secretario de Cupra indicó que en lugar de un turno en las industrias se podría trabajar en dos, duplicando así sus posibilidades, sin necesidad de nuevas inversiones.

Por el lado de los faconeros, Daniel Pereyra, secretario general de la Asociación de Faconeros de Pollo, indicó que “los metros de galpón instalados permitirían ampliar alrededor de un 30% lo que se produce en la actualidad”.

El representante de los productores, sin embargo, se mostró algo escéptico respecto a un posible incremento en la demanda. “En el pasado, ya existieron anuncios y pedidos de este tipo desde Venezuela, que es nuestro principal mercado y quien nos está dando un gran respaldo en la actualidad y luego se detuvieron las exportaciones hacia allí (a mitad del 2012) con consecuencias muy malas para el sector”, explicó Pereyra.

Ambas fuentes coincidieron en que es vital poder diversificar los lugares hacia donde se exporta y lograr la habilitación sanitaria para entrar a otros mercados y acceder a la Unión Europea, que no solo paga va-lores sensiblemente mayores, sino que representan más seguridad ante posibles cierres de Venezuela.

En ese marco, inversiones de magnitud en cámaras de frío para la industria, como en la construcción y ampliación de galpones para los faconeros, solo se justificarían si se logra el acceso a nuevos destinos.