La sequía llegó al Congreso

Durante el año legislativo fue poco lo que se avanzó en nuevas leyes para el agro ! ! !

–Se nos va otro año, amigo Don Tecno, y el campo sigue relegado en las políticas públicas. Si bien todos conocemos el conflicto que mantienen desde hace ya cinco años el agro y el Gobierno nacional, también es llamativa la poca injerencia que tiene el sector en el debate legislativo.

–Sucede que todo es parte de la misma política. Desde que la oposición perdió la presidencia de la Comisión de Agricultura de la Cámara de Diputados, el tratamiento de los temas vinculados con el sector se ha convertido en una misión casi imposible, según se quejan algunos diputados.

–Pero lo concreto es que se sigue sin legislar cuestiones relevantes como una nueva ley de emergencia, un seguro agrícola y de uso de semillas.

 

–Está usted en lo cierto Don Produ; al parecer hay un mandato exclusivo que baja desde la Casa Rosada que sólo se discuta a nivel de la comisión aquellos proyectos originados por el Ejecutivo. Es por eso que durante el último ejercicio legislativo la comisión que preside el diputado oficialista Luis Basterra, ex vicepresidente del Inta, sólo ha tenido alrededor de cinco reuniones de trabajo, de acuerdo con lo manifestado por el diputado radical Juan Casañas, extitular de esa comisión en la Cámara Baja.

–Basterra es un profesional que conoce muchos del sector agropecuario. Muy valorado en el Inta…

–Nadie pone en tela de juicio su idoneidad como técnico. Sin embargo, la línea que viene desde el Ejecutivo hace que su función legislativa se vea acotada a las iniciativas oficiales. En este marco, cualquier propuesta vinculada con el sector agropecuario que presenten los diputados de la oposición no tendrá cabida.

–Hace unos días, legisladores de la oposición presentaron dos proyectos de ley que regulan la producción y comercialización de semillas. Pero, en función de los antecedentes inmediatos, podrían quedar archivados si el Ejecutivo decide enviar al Congreso el proyecto oficial que elaboró este año.

–Todo parece indicar que el nuevo marco legal que regule el uso de semillas y de la tecnología será de puño y letra del Gobierno. Con mayoría en el Congreso, hay coincidencia en que el proyecto oficial saldría sin cambios.