sábado, 19 de enero de 2013


CIOLAR sin recursos para levantar cosecha

José Hilal, presidente de la Cámara de Industriales Olivícolas (CIOLaR), manifestó que la industria se encuentra desfinanciada, para poder levantar la aceituna, y reiteró que necesitan ayuda financiera. Además comentó que hay problemas con la disponibilidad de mano de obra.
Los primeros días de febrero próximo, comienza la época para la cosecha del fruto del olivo en todo el territorio provincial, por tal motivo, EL INDEPENDIENTE dialogó con el presidente de la Cámara de Industriales Olivícolas de La Rioja (CIOLaR), José Hilal, para conocer en qué condiciones se encuentra el sector, luego de un 2012 complicado.
Al respecto, sostuvo que “el sector no tiene los medios económicos suficientes para levantar la cosecha. No hay recursos para levantar la cosecha y la industria está desfinanciada”.
Explicó que “la industria hizo un esfuerzo enorme, para llegar con vida, algunas, en su mayoría, recibieron la ayuda del Fondo Rotatorio de 20 millones, pero mediante esa ayuda, pudimos tener un poco de oxígeno, sin embargo, los esfuerzos fueron por subsistir y llegamos financieramente complicados, para el comienzo de la cosecha este año”. Además, resaltó que el Fondo Rotatorio no llegó a todas las empresas, “hay algunas a las que les falta percibir la ayuda”.
Hilal, manifestó que ante la falta de fondos para poder levantar la aceituna, los productores deben recurrir a tres formas de ayuda “el bancario, que no existe, porque todas las empresas tienen su crédito bancario agotado, y los bancos están renuentes a prestar dinero al sector; la ayuda gubernamental, que el Gobierno tenga algún plan de fomento para levantamiento de cosecha, según trascendidos, puede haber algo de eso, pero no está todavía plasmado en medidas concretas; o se pueden hacer mecanismos de pre-venta de aceituna, para conseguir financiamiento”.
A lo que agregó, “tanto el bancario, como en la pre-venta, las industrias pierden mucho dinero, y es recesivo, porque el comprador, que está poniendo plata por adelantado, o el banco que está prestando dinero, necesita ganar lo más posible”, por lo que en esos dos esquemas, “lamentablemente se perjudica toda la cadena, porque el industrial tiene que ‘apretar’ los precios para abajo, para poder tener rentabilidad, por lo tanto se perjudica la producción primaria”.
Aseguró que “necesitamos ayuda financiera por parte de organismos estatales a nivel nacional, porque sabemos que la provincia tiene recursos acotados, para poder fondear la actividad, para que se pueda levantar el fruto, y que las industrias puedan tener oxígeno para trabajar”. También informó que “tenemos algunas conversaciones sobre qué asistencia puede llegar a haber, pero no tenemos concretamente líneas de acción, ni métodos de procedimientos, para ver cómo se va a efectivizar”.
En cuanto a la disponibilidad de mano de obra para la cosecha, sostuvo que “hay un problema: Habitualmente, venían trabajadores de países limítrofes, a los que ahora se les dificultaría venir, sobre todo por la situación del dólar, porque ellos necesitan llevar su dinero en dólares al exterior, y no lo pueden hacer por política nacional”. Aclaró que “esa gente probablemente no venga, y dependemos de trabajadores golondrina de provincias vecinas que puedan venir. Todas las industrias y fincas, están haciendo gestiones para conseguir esos trabajadores, porque no va a ser fácil el tema de la mano de obra”.
El presidenta de Violar, manifestó que “como cámara, y mi visión como industrial, tiene que ser forzosamente optimista, lo que pasa, es que una cosa es lograr levantar la cosecha, y otra que ese levantamiento sea beneficioso para el productor y la industria, muchas veces llenamos fábricas, como en el 2011, y perdimos plata a mares”. A lo que agregó “no sólo es llenar la fábrica, sino que el artículo pueda ser vendible, rentable y que le permita a uno cumplir con los compromisos, y pagar el dinero que nos prestaron o conseguimos”.
PROBLEMA ESTRUCTURAL
También expresó que “el panorama general, no varió mucho desde el año próximo pasado, es decir el problema central que tiene la olivicultura, no solo en La Rioja, sino en la Argentina, es la pérdida de la rentabilidad, la pérdida del poder adquisitivo de nuestra moneda, que es la aceituna”.
Comentó que “hace 30 años atrás, con dos kilos de aceituna se compraba un kilo de carne, y hoy en día, hacen falta como 20 o 25 kilos de aceituna, para comprar un kilo de carne”, por ello, sostuvo que “el producto perdió su precio relativo, con respecto a la economía en las últimas tres décadas, y desde el 2008 hasta ahora, se profundizó el proceso en el cual subieron los costos que tiene tanto el agro, como la industria olivícola a niveles siderales”.
Además comentó que “los precios, tanto del producto primario, como del producto industrializado, no acompañaron esa suba de costo, por eso, el producto entró en una crisis muy fuerte, que viene de décadas de arrastre, y de los últimos años, donde se profundizó esa crisis”.
Hilal reflexionó que “de ese problema central que tiene, la olivicultura no se recuperó, ni se va a recuperar en mucho tiempo, porque va a ser un proceso largo”.
“Coyunturalmente hubo paliativos y hay acciones gubernamentales de la provincia, tendientes a ayudar a recuperar la rentabilidad del sector, pero son procesos lentos que se plasmarán con el tiempo”, manifestó. Finalmente expresó que “en este momento la situación sigue siendo muy crítica, porque tenemos en frente una cosecha de buen volúmenes de kilos, y el sector está muy desfinanciado y con perspectivas poco claras”.
“ESTÁ MEJORANDO LA SITUACIÓN”
La secretaria general del Sindicato de Trabajadores de la Industria de la Alimentación, Valle de González, en diálogo con EL INDEPENDIENTE, manifestó que “tuvimos un año bastante difícil, pero hay que tener mucha fe, de que vamos a salir adelante”.
Asimismo, sostuvo que “esperemos que esta cosecha sea para bien, para que las empresas puedan comprar aceituna”. A lo que agregó “esperemos que este año sea positivo, por lo menos la empresa más grande que tenemos nosotros, que Agro Aceitunera S.A., está cumpliendo con los sueldos, está trabajando normal, no dejó ningún trabajador en la calle. La gravedad ya pasó, esperemos que siga mejorando”.
También comentó que “esa empresa, tiene 500 trabajadores y es donde más radicaba el problema. Esperemos que con la ayuda del Gobierno nacional y provincial, esta empresa salga a flote como todas las empresas, porque si bien las otras tienen menos empleados, están en la misma situación en cuanto a las posibilidades de exportación”.
Finalmente dijo que “está todo controlado, se pagaron los sueldos, el aguinaldo como corresponde, se pagó en tiempo, así que creo que estamos mejorando la situación”.

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