domingo, 10 de agosto de 2014

Argentina y Brasil han perdido competitividad en la soja


Para el economista Guillermo Rossi, de la Bolsa de Comercio de la República Argentina, en el comienzo de la semana se insinuó con una recuperación de los precios, después de varias semanas consecutivas de fuertes bajas. Sin embargo ya cambió la tendencia positiva del mercado de Chicago. En éste momento los cultivos de soja y […]
Para el economista Guillermo Rossi, de la Bolsa de Comercio de la República Argentina, en el comienzo de la semana se insinuó con una recuperación de los precios, después de varias semanas consecutivas de fuertes bajas. Sin embargo ya cambió la tendencia positiva del mercado de Chicago.
En éste momento los cultivos de soja y maíz “vienen muy bien” en el norte, lo que permite augurar una buena campaña en ambos, algo que sería record. Como consecuencia existe una fuerte tendencia bajista en los últimos meses que serían los más bajos en los últimos cuatro años para ambos cultivos.
Según Rossi, para la próxima campaña sojera la caída de precios a nivel internacional complica los planteos de los países de la región, “porque a lo largo de estos años hemos trabajado con una estructura de costos bastante pesada” dijo.
Los dos productores más importantes de la región, Argentina y Brasil, han perdido competitividad con la caída de la soja en Chicago. En Brasil la producción se ha radicado en el centro, lo que le genera un costo de transporte considerable hacia los puertos. En el caso de Argentina, tributa un derecho a la exportación (retención) que es muy significativa (35 % porotos y 32 % para aceite y harina) que castiga el ingreso del productor.
Consultado sobre el futuro de la producción de soja en el vecino país, Rossi manifestó que se advierte que el “área no tendería a caer”. Sin embargo, cultivos alternativos como el maíz, tiene una necesidad financiera más importante y ahí sí “hay planteos para la campaña 2014-15 son un poco más complicados” dijo. Continuó diciendo que en su país es un cultivo que “se adapta a todas las regiones, no insume muchísimo capital, es muy competitivo y las primeras previsiones hacen pensar que podríamos estar manteniendo el área del año pasado, e incluso aumentarla”.
En todos los países de la región (Brasil, Argentina, Bolivia, Uruguay y Paraguay) el área de soja se ha ido incrementando, alcanzando niveles agregados en unas 55 millones de hectáreas. Explicó que en un futuro esto tendería a estabilizarse ya que el margen para seguir aumentando el área “es más limitado que antes”.
Argentina, por ejemplo, ha crecido 10 millones de hectáreas en la última década, gracias al corrimiento de la ganadería a otras zonas marginales y la disminución de otros cultivos. Sin embargo, por la necesidad de rotación que se impone, el crecimiento se ha visto limitado.
Típicamente, comentó, el productor cubre a futuro un 25 % y 30 % de su cosecha. Esa mercadería se va volcando paulatinamente al servicio comercial.
En el caso de Argentina en los últimos años con un debilitamiento del peso, el productor tendió a defenderse un poco más con su mercadería. Es por ello que la comercialización se ha retrasado ligeramente de los patrones habituales, pero siempre por una cuestión de cobertura y de asegurar los márgenes.
Todo el contexto que se está viviendo en Argentina en principio “no repercutiría en el mercado de granos en el corto plazo” dijo. Aclaró que si se mantiene este litigio la consecuencia podría ser una caída de la inversión. Eso implicaría turbulencias con el tipo de cambio y las tazas de interés, provocando un escenario que no favorecería la animosidad del productor para aumentar la inversión.

TRIGO.
En cuanto al trigo, en la campaña 2014-15 la región va a estar abastecida. Es sabido los problemas que hubo en Uruguay para completar las áreas. Los analistas calculan que cayó 350.000 hectáreas. Pero por otro lado, en Paraguay, Brasil y Argentina, hay un fuerte crecimiento en el área sembrada con trigo. En los meses de septiembre, octubre y noviembre ingresará mucho grano al mercado y habrá abastecimiento para el próximo año.

MAÍZ.
Respecto al maíz, Argentina y Brasil, dieron saldos exportables muy favorables en los últimos años. No obstante, en ambos casos se va a dar una reducción del área sembrada, “quizás vamos a tener un saldo exportable menor pero se colocarán en el podio como máximos exportadores detrás de Estados Unidos”.

PRECIOS.
Para Rossi el trigo tiene una curva de vencimientos más favorable. El 95 % de la oferta es del hemisferio norte, pero se están presentando problemas de calidad muy importantes. Uno de ellos se debe a las persistentes lluvias en Europa en los últimos meses y la seca en Estados Unidos el último invierno. Según Rossi el desenlace final dependerá mucho de lo que pase en Sudamérica. En Chicago se observa una suba de US$ 20 en los futuros más diferidos de trigo y eso sería “muy bueno para nuestra economía” dijo.
En el maíz se observa una tendencia más estable, donde el mundo va a tener muchísimo abastecimiento. Estados Unidos va a tener una producción igual o más grande que el año pasado y la recuperación del precio se azora más complicado porque necesitan más demanda.

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