El mercado más invertido

En las últimas semanas los precios del trigo en Argentina explotaron y se adelanta que el gobierno argentina no podrá impedir que se termine importando el cereal. En Brasil se llegará a la cosecha sobre agosto-setiembre casi sin existencias. En Uruguay los pocos lotes de trigo de buena calidad son ofrecidos a precios bastante más altos que los que informa la Cámara Mercantil.
Si uno mira las cotizaciones por la producción disponible y por el de la próxima cosecha las distancias son abismales. C los futuros más cercanos tienen precios más altos que los correspondientes a la próxima campaña se dice que el mercado está “invertido”. Esto es, vale más el producto disponible que el que ingresará más adelante. Es lo que pasa actualmente con la soja y el maíz en Estados Unidos. La sequía del año pasado derrumbó las perspectivas de producción y hoy la oferta de ambos granos en ese mercado es más que ajustada. En tanto, se prevé un incremento de la producción que ingresará a partir de agosto o setiembre. Por eso, el contrato correspondiente a julio –el más cercano- tiene un valor US$ 50 por tonelada superior a la posición de noviembre en Chicago.
Lo que pasa con la soja y el maíz en Estados Unidos está pasando con el trigo en el Mercosur. En la zafra 2012/2013 el clima jugo una muy mala pasada derribando los rendimientos y, especialmente, la calidad del cultivo. Tanto en Brasil como en Argentina se dio un retroceso en el área. Eso llevó a que la región fuera deficitaria en trigo y obligue a un importador neto como Brasil a tener que salir a buscar oferta en Estados Unidos y Canadá. La producción en la región fue baja y con problemas severos de calidad. Eso lleva a que los precios sean tan altos por el trigo bueno. Y eso durará hasta que llegue la próxima cosecha. Los que tienen trigo piden lo mismo que cuesta traer trigo desde los puertos del Golfo de México o desde Canadá.
En Argentina los precios se dispararon al no haber oferta en el mercado. En realidad, los analistas y operadores de la exportación señalan que hay oferta en manos de productores y acopios pero eso no se traduce en la realidad. En el Mercado a Término de Buenos Aires el contrato de trigo para julio superó en la tercera semana de junio los US$ 500 por tonelada. Se trata de precios para la industria por lo que no se aplica la retención del 20% a las exportaciones. En tanto, las cotizaciones para diciembre, enero o febrero están entre US$ 195 y US$ 205 por tonelada. En este caso se aplica el 20% de la retención.
En Brasil no se llegó a esos extremos pero se está pagando un premio alto por el poco stock de trigo que le queda al gobierno. Además, sacaron por cuatro meses el Arancel Externo Común para el ingreso de trigo de fuera del Mercosur. En Uruguay queda mucho trigo pero el problema es la calidad. Las pocas referencias para el trigo a diciembre sobre Nueva Palmira se ubican entre US$ 240 y US$ 245 por tonelada. En tanto, los que tienen trigo en su poder de buena calidad piden US$ 350 por tonelada para empezar a conversar.
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