jueves, 31 de octubre de 2013

“La materia prima está carísima”, advierten desde los fabricantes de pan

En la Federación Panaderil de la provincia de Buenos Aires aseguraron que “hay trigo, pero por las nubes”.






La disparada que tuvo el precio del trigo en los últimos meses puso en alerta a varios. Entre ellos, a los fabricantes de pan, proveedores de un alimento esencial para la tan mencionada “mesa de los argentinos”. Desde la Federación Panaderil de Buenos Aires, su vicepresidente, Raúl Santoandré, se mostró desconcertado ante esta situación, y manifestó que muchas veces ellos absorben el aumento sin trasladarlo al precio final.

“Estamos viviendo incertidumbre”, fueron sus primeras palabras con las cuales describió este momento para su sector. “No entendemos el por qué, pero nunca en la historia se dio esto. Vale más el trigo que la soja o el azúcar”, ejemplificó.

Sin embargo, relativizó que no haya trigo para moler, como se afirma: “Si nos vamos a guiar por los comentarios, decían en junio que no iba a haber trigo en octubre, pero trigo hay, tenemos molinos que nos proveen en menor escala y por eso el precio se disparó. La cosecha no fue la mejor, en gran parte del Norte está el tema fusario, que perjudicó las cosechas. Los precios lógicos están por las nubes”.

Santoandré espera con ansias que, durante noviembre, “entre la cosecha de parte de Entre Ríos y Tucumán. Ojalá esto descomprima los precios”.

“Nuestro sector está padeciendo en gran parte. El trigo en nuestro país está más caro que en Chicago. Esperamos que entre la cosecha nueva, pero es la que se ha perdido. Vamos a ver el mes que viene si se descomprimen los precios que manejamos hoy por hoy”, añadió.

Luego, el representante de los panaderos de la provincia de Buenos Aires advirtió: “Muchas veces, el panadero absorbe y no traslada los aumentos que se han dado. La entrega (de materia prima) no es la normal, no al precio que uno manejaba o que uno quisiera. Está carísima. Hasta el momento, no tenemos novedades de panaderías desabastecidas, sí de molinerías que están cerradas”.

“Los que vendemos el pan somos los que damos la cara. Eso mucha gente no lo entiende. No se trasladan en muchos lugares los precios a lo que se debiera. Estamos viviendo una muy mala situación”, finalizó.

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