Avanza la cosecha y sube la soja local

El comportamiento alcista no hace más que reflejar que la demanda necesita el grano. La falta de certeza sobre el número final de la cosecha limita las ventas de parte del productor.

Cuando se esperaba que los precios de la soja continuaran bajando, por la presión de la cosecha local y el contagio con los mercados externos, los valores tuvieron un comportamiento inesperadamente alcista en el mercado.

La semana comenzó con una leve baja en sintonía con la caída de Chicago, que estuvo reflejando la fuerte caída que registraron otros commodities a partir de la noticia de la desaceleración en el ritmo de crecimiento de la economía china.

El país asiático reportó que el PBI aumentó un 7,7 por ciento entre enero y marzo de 2013, comparado con 7,9 por ciento registrado durante el último trimestre del año anterior y generó una ola de ventas de materias primas donde el oro y el petróleo fueron los más afectados.

 

La caída del oro, considerado en los últimos años como refugio de inversión, en un 10 por ciento de su valor en tan solo dos jornadas impactó en los demás mercados. Con bajas de la soja de nueve dólares en el mercado de Chicago y de cinco dólares en el mercado local.

En las jornadas siguientes, la soja estadounidense sólo recupero parte de las pérdidas, mientras que en nuestro país el precio de la posición mayo en el Termino de Buenos Aires (Matba) pasó el lunes de 317,50 dólares a 326,50 el miércoles, día que superó el mercado externo y donde aparecieron muchos compradores.

La suba no fue sólo de los futuros, sino también de los precios de la oleaginosa disponible que abiertamente llegó a 1.650 pesos por tonelada. Por lote con entrega puntual mejoró hasta 1.680 pesos.

El comportamiento alcista no hace más que reflejar que la demanda está necesitada de la mercadería y que la oferta no llega al mercado aún cuando la recolección esta semana retomó buen ritmo, gracias a las condiciones climáticas favorables.

Sin certezas. Se estima recolectado el 30 por ciento del área de soja, con resultados que no se definen para poder hablar claramente de una súper campaña. Muchos productores están obteniendo rindes por debajo de esperado, mientras que otros fueron favorecidos por el clima que acompañaron el desarrollo de los cultivos y los rendimientos están arriba del promedio.

La falta de certeza sobre el número de producción, hay estimaciones desde 51,50 millones de toneladas a 48 millones, es un elemento que limita los negocios de ventas de soja de los productores.

El ritmo todavía no muestra el nivel histórico de negocios a la misma fecha del año.

El productor está decidido a vender sólo lo necesario e imprescindible, a sabiendas que muchos deben hacer frente a gastos con vencimiento a cosecha.

El productor de soja puede aprovechar a vender a los actuales niveles de precios, que no muestran en su totalidad la presión de cosecha frente a la expectativa de posibles bajas externas cuando avance la siembra estadounidense.

Muchos tienen realizados negocios de maíz que cubren sus necesidades inmediatas pero la oportunidad de realizar nuevas operaciones está limitada a la necesidad puntual de algún exportador que necesita la mercadería para solicitar ROE.

Los grandes compradores de maíz están retirados mientras que son pocos los que aparecen con ofertas por debajo de lo que puede pagar el consumo.

Así el productor tiene pocas alternativas para vender el maíz, menos para vender el trigo. Solamente puede decidir sobre la soja, hoy convertida en un refugio como para muchos es el oro.

*Analista de mercado de fyo.com