Manejo de plagas tempraneras en soja

Uso de insecticidas curasemillas

En el marco de un sistema de producción el manejo de plagas es fundamental, desde el punto de vista económico y ecológico. El conocimiento del modo de acción de los diferentes ingredientes activos sobre las plagas y la formulación es la base para la adopción correcta de insecticidas.

Picudo de la soja (Sternechus subsignatus).

El cultivo de soja requiere especial cuidado en la fase de germinación y plántulas, porque en esta etapa aparecen las plagas tempranas o iniciales, que pueden reducir el stand de plántulas en forma significativa, lo que se refleja en una merma en el rendimiento.

El tratamiento de semillas con insecticidas es una alternativa eficiente para la protección del cultivo en la fase de germinación y plántula, de esta manera garantizan la buena implantación del cultivo.
La eficiencia y residualidad de los insecticidas curasemillas dependen del ingrediente activo, de la especie de insecto, del lugar de ataque, del clima entre otros factores ambientales.

Un grupo de plagas iniciales se localizan en la parte subterránea, alimentándose de semillas o raíces y otros se encuentran en la superficie del suelo como orugas cortadoras, brocas o bien atacando foliolos.

Gorgojo de suelo (Pantomorus sp) y daños causados en el cultivo.

Según Gassen (2006), cuando el insecticida es aplicado en la semilla, la concentración del producto en el cuello de la planta a partir de la absorción por las raíces, en condiciones de déficit hídrico, puede ser insuficiente. En condiciones de clima favorable para el desarrollo de la planta y la acción de los insecticidas, el curasemillas es eficiente en el control de plagas de superficie de suelo.

Eficiencia, dosis y persistencia. La eficiencia de los curasemillas depende del modo de acción de los mismos, los cuales manifiestan su potencial a partir de dosis razonables. La eficacia de insecticidas está directamente relacionada a la dosis para cada especie de plaga. Por ejemplo, la dosis de Fipronil para mejorar el control de cien pies es diferente a la dosis para controlar larvas de vaquitas y picudo de la soja.

Es importante identificar las plagas que atacan en la etapa inicial y utilizar la dosis correcta y eficiente para cada situación. El tiempo de persistencia de insecticidas en el control de plagas en plántulas o semillas es de aproximadamente tres semanas a partir de la siembra. Periodos mayores de persistencia pueden ser logrados con dosis mayores, pero raramente pueden alcanzar cuatro semanas de control efectivo a partir de la siembra.

Insecticidas no adecuados para el tratamiento de semillas. En busca de reducción de costos muchos productores optan por formulaciones de insecticidas registrados para aplicaciones foliares en tratamientos de semillas. Algunos insecticidas foliares pueden controlar plagas subterráneas, pero en algunos casos pueden causar fototoxicidad en plántulas, resultando en un estrés en la germinación o en el desarrollo de las plantas.

La reducción de costos representa un valor pequeño en relación al potencial elevado de riesgo por la fitotoxicidad en las plántulas o en ineficiencia en el control de plagas localizadas encima de la superficie del suelo. En muchas ocasiones las pérdidas de rendimiento por fitotoxicidad o por muerte de plántulas son mayores que la diferencia ahorrada por la compra de productos no apropiados.

Ventajas de los curasemillas. El uso de insecticidas curasemillas es el método más adecuado de protección de cultivos en la etapa de germinación y plántulas.

Los insecticidas curasemillas protejen los cultivos en sus etapas de germinación y plántulas.

Representa una tecnología eficiente con mínimo impacto sobre el medio ambiente. No daña a los enemigos naturales.

El uso de dosis correctas para cada cultivo y grupos de plagas son la clave para el éxito de esta tecnología en cultivos como soja, trigo, maíz, arroz y girasol.

Plagas iniciales en el cultivo de soja

Estas se agrupan en plagas subterráneas y de la superficie del suelo. En nuestro país las plagas subterráneas más comunes son el gorgojo de suelo Pantomorus sp, larvas de vaquitas Diabrotica speciosa, Cerotoma sp, Colaspis, gusano alambre Conoderus sp. Estas se alimentan de las semillas o de las raíces, poseen un gran potencial de causar daños.

Los cien pies aparecen en épocas secas.

Las plagas que se encuentran en la superficie del suelo son el picudo de la soja Sternechus subsignatus, cuyos adultos raspan el tallo o bien dañan plántulas de soja. La broca del cuello Elasmopalpus lignosellus que ocasiona galerías en la zona del cuello. La oruga cortadora Agrotis sp, el chinche barriga verde Dichelops spp, es una especie que normalmente ataca plántulas de maíz, pero luego se traslada a la soja, causando pérdidas de plantas a causa de los daños en la zona del cuello.

Broca del cuello (Elasmopalpus lignosellus).

Los cien pies son considerados plagas ocasionales que pueden causar daños severos y son de difícil control porque son Diplopodos o Quilopodos y la mayoría de los insecticidas no tienen efecto sobre los mismos. Los cien pies aparecen en época de sequías en el momento de la siembra, atacan plántulas y los daños son irreversibles. El fipronil presenta buen control sobre los mismos en la dosis de 200 cc por 100 kg de semilla.