Conocer cuántos buques poteros de bandera extranjera operan en la zona adyacente a la milla 201 durante la zafra de calamar ya no será un misterio para los investigadores y autoridades de la cartera de Pesca Nacional.
El INIDEP acaba de presentar un software que monitorea la flota de pesca de calamar al permitir localizar y cuantificar los buques que llevan a cabo la actividad que constituye una de las pesquerías más importantes de la industria pesquera argentina.
La particularidad del calamar es que se distribuye tanto en aguas nacionales como internacionales, circunstancia que dificulta el control de las operaciones pesqueras para mantener la sustentabilidad del recurso. La herramienta recientemente desarrollada por el INIDEP facilita esta tarea.
El método de relevamiento surge a partir de imágenes suministradas por la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (CONAE). Con esta información miembros del Subprograma de Sensoramiento Remoto, en cooperación con el Programa de Pesquerías de Cefalópodos del INIDEP, desarrollaron el programa que posibilita, entre otras cosas, obtener información sobre las flotas poteras que pescan dentro y fuera del ámbito de administración argentina.
La población de calamar se distribuye a lo largo de la plataforma argentina y en aguas internacionales. Una de las mayores dificultades para la evaluación de este recurso pesquero siempre ha sido conocer el número de barcos extranjeros que pescan en aguas internacionales. “Este software permite identificar las zonas donde operan los buques poteros, así como también inferir su cantidad”, señala el documento elaborado por el INIDEP para dar a conocer la iniciativa.
La manera en la que se lleva adelante esta pesca es fundamental para la utilización del software. Los satélites pueden captar las zonas altamente resplandecientes que se originan a partir que cada buque utiliza durante la noche entre 120 y 150 lámparas incandescentes que proyectan 240 a 300 kw para captar al recurso.
“Se comparan datos de número de buques y posicionamiento de la flota nacional -de la que sí se cuenta con información precisa y que es monitoreada de manera permanente- con las imágenes obtenidas por los satélites, y así se estima el número de buques que componen la flota extranjera”, revelan los investigadores del proyecto que dirige Carlos Lasta.
El proceso de monitoreo y cuantificación de la flota potera que se lleva adelante por medio de este software consiste en dos fases: la de Recepción y la de Procesamiento de las imágenes. Esta última comprende las etapas de Análisis (se determinan las áreas con información importante para el proceso); Segmentación (identificación de áreas iluminadas por los barcos); Validación/Calibración (asignación del número real de barcos a las áreas iluminadas y utilización de información del posicionamiento de la flota nacional); y de Inferencia (utilización de la información recopilada para estimar el número de barcos presentes en áreas iluminadas por flotas extranjeras).
En una instancia inicial del proyecto se realizó una primera validación/calibración de las imágenes mediante el seguimiento de la flota nacional, la cual arrojó resultados satisfactorios tanto para el monitoreo como para la estimación del número de barcos. “Si bien se asume que existe cierto grado de error en el mecanismo de inferencia, se estima que al incrementar el número de imágenes validadas/calibradas el ajuste del modelo reducirá este error”, estiman los investigadores.
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