Etchevehere: “Los exportadores y la molinería son los responsables de convalidar la política del Gobierno”

Luis Miguel Etchevehere, titular de la SRA, conversó con Alejandro Cánepa sobre la situación de la producción triguera y sus causas. Además, adelantó que su primer discurso en la feria Ganadera que comienza el 18 de julio está en preparación, y que “la idea es que no falte nada, porque nos pasaron muchas cosas en el último año”.

AC: ¿Cómo considera la frase del ministro Yahuar: “Hace falta ponerse el látigo en la mano para que el trigo aparezca”?LME: Es muy desacertada. Tenemos que dejar de lado el autoritarismo, la amenaza, la crispación. No es manera de referirse a nadie. Me imagino que no se refirió a los productores sino a los exportadores, con los que firmó un convenio para que devolvieran el trigo si hace falta. Ellos están todas la mañanas sentados en la mesa del trigo a la que los productores nunca fuimos invitados.

AC: ¿Los productores tienen algo de trigo?LME: No, la cosecha fue de 9 millones de toneladas: 5 millones compraron los exportadores, 3 millones la molinería, medio millón se guardó para las semillas y el resto está desparramado por toda la Argentina, pero es un trigo que no está para pan porque está muy lejos y no les conviene a los propios molinos pagar el flete. Por otro lado, generaron un “pan fantasma”, porque nadie lo encuentra y que en teoría estará las primeras dos horas del día. Este es otro de los papelones del Gobierno, que cree que va a seguir engañando a la población con estas políticas de presión, de querer agredir permanentemente al otro. La realidad es que los grandes perdedores son el productor por un lado y el consumidor por el otro. Después de las amenazas la expectativa de siembra es igual a la del año pasado, es decir que dentro de un año vamos a tener el mismo problema.

AC: ¿Qué puede decir de esta situación que llevó al pan a tener un precio exorbitante?LME: Si podemos sacar algo positivo de todo esto es que nos tiene que quedar grabado que esta política de intervenir los mercados con precios máximos y mínimos,  la prohibición de las exportaciones, la presión impositiva y el  dólar diferencial, no sirven. Algunos piensan que liberar el mercado traerá inflación, pero deberían ver lo que pasa en Uruguay, Paraguay, Brasil, Chile y Bolivia en donde les pagan al productor el precio lleno por su producto, no tienen inflación , producen más y tienen alimentos a precios acordes con la canasta familiar. Aparte le agregan valor en origen generando divisas y puestos de trabajo genuinos. Mientras, nosotros caímos del tercero al undécimo lugar como exportador mundial de carne, tenemos escasez de harina y parece que vamos a tener serios problemas con el maíz también. Esta política fracasó, y no entendemos cómo a pesar de esto el gobierno no hace los cambios necesarios.

AC: Sin embargo los pueblos convalidaron este modelo en las elecciones de 2011.LME: Sin duda, y a los dos meses la gran mayoría de los pueblos del interior que votaron al Gobierno se arrepintieron cuando vieron la verdad de la situación; y es que se había inyectado mucho dinero para dar la sensación de que eso iba a durar para siempre y a los dos meses se cortaron buena parte de los subsidios que se estaban dando, se subieron los impuestos y se cortó la actividad económica.

AC: El 17 de julio se cumplen cinco años del freno a la 125 ¿Qué dejó la lucha del campo?LME: Si las retenciones móviles se hubiesen aprobado estaríamos con retenciones del 50%, y aunque ahora también hay producciones que son inviables seguramente se hubieran dado antes. Por un lado fue muy perjudicial y por el otro demostró la fibra que tiene el productor agropecuario, que salió  a defender no solamente una cuestión de dinero sino también de institucionalidad, porque se hablaba de federalismo, de división de poderes. Fue una gesta que va a quedar para siempre en la historia argentina.

AC: ¿Los partidos de la oposición se acercaron al campo?LME: Sacando al Gobierno, todos ven al campo como una solución, como un aliado, como el camino para ayudar al desarrollo de la Argentina. Con diferentes matices, pero todos pensando en que de ser Gobierno van a tener una política que ayude al campo a expresar todo su potencial.

AC: ¿Les han acercado alguna propuesta en particular?LME: Sí, hemos conversado sobre la eliminación de retenciones al trigo, maíz, girasol y carne. También de ir reduciendo paulatinamente las retenciones de la soja, recuperar mercado, promover las exportaciones y que se produzca más. Además es urgente que pensemos en infraestructura, porque si se llegara a producir más de 100 millones de toneladas de granos sería imposible trasladarlos. De todo eso se está hablando, y consideramos  que se necesita concretarlo dos años antes del cambio de Gobierno.

AC: ¿Por qué el Gobierno no informa la cantidad de trigo que hay disponible?LME: No lo dicen porque no les conviene, se les descubre el juego. La cadena se quedó con 6 mil millones de dólares entre el FAS teórico y lo que efectivamente cobramos los productores porque el Gobierno jugó en contra del campo. Cada vez que el mercado estuvo libre el precio funcionó como un incentivo para poder sembrar. Nunca faltó producto. Producíamos el triple de lo que necesitábamos.

AC: Sin embargo, Pedro Peretti, de FAA, dice que la escasez de trigo es parte de una maniobra contra el gobierno.LME: No estoy de acuerdo. El convenio que firmó el secretario de comercio en el verano con los exportadores implicaba que el gobierno les daba ROE’s por cinco millones de toneladas pero con la condición de que si faltaba trigo las tienen que devolver. Ahora, el gobierno “obliga” a los exportadores a vender al doble del precio al que compraron el producto en el verano. Es un excelente negocio manejado entre dos o tres en una mesa. Los productores y los consumidores perdimos, mientras que los exportadores y la son los absolutos responsables de haber convalidado esta política oficial de poder comprar el trigo a un precio vil a costa de los productores y vender a precio internacional la harina. Esto vienen haciéndolo desde 2006 a la fecha.

Fuente: “La hora del Campo”
Radio Continental Alejandro Cánepa