Las gremiales agropecuarias y “Un solo Uruguay” ahora centran sus baterías en dos temas bien específicos: quieren una rebaja del 23% en el gasoil para llevarlo a $ 32,70 para lo que elevaron ayer al gobierno una propuesta de ocho puntos y una solución para el endeudamiento agropecuario, porque dicen que en algunos sectores la morosidad ya supera el 30%.
El gobierno quedó en estudiar el planteo que apunta a que el gasoil de uso productivo que hoy cuesta $ 40,4 quede al mismo nivel que en Argentina y Brasil. La propuesta implicaría llevar el gasoil que hoy cuesta US$ 1,42 a US$ 1,15 exactamente el mismo nivel al que está en Argentina.
En Brasil cuesta US$ 1,05 y en Chile US$ 0,92. La propuesta tiene un costo de US$ 240 millones que el Estado se compensaría por varías vías como, por ejemplo, el incremento de la carga tributaria sobre el gasoil para el transporte internacional que no se usa en Uruguay y la suba de la recaudación del Impuesto a la Renta de las Actividades Económicas (IRAE) que se produciría por el incremento de la venta del combustible.
Los representantes agropecuarios tuvieron una reunión previa en Canelones para dar los toques finales a su propuesta sobre el gasoil para la que esperan una respuesta a la brevedad. El encuentro posterior con representantes del gobierno en el Ministerio de Ganadería fue largo (más de tres horas) y su tono parece haber sido mejor que el de reuniones anteriores.
Guillermo Franchi, portavoz de “Un solo Uruguay, dijo que “por lo menos se aceptó por parte del Poder Ejecutivo trabajar sobre una propuesta concreta que se refiere básicamente a llevar el precio del gasoil al precio de paridad de importación”. “De los 900 millones de litros que se consumen en Uruguay, el 70% corresponde al transporte.
Nos parece que es el combustible que más impacta en el precio de los productos a los que accede el consumidor final”, dijo Franchi, que espera también un impacto en la desaceleración de la inflación. Franchi cree que también debe revisarse la transferencia que hace el sector agropecuario para subsidiar el gasoil usado en el transporte urbano, que calculó en US$ 115 millones anuales. Si baja el gasoil, estas empresas se beneficiarían y también debería caer el monto mencionado que opera como un subsidio, consideró Franchi.
“Un solo Uruguay” y las gremiales consideran que las medidas sectoriales adoptadas por el gobierno hasta ahora no generan impacto y por lo tanto relativizan el impacto de la rebaja del gasoil para los arroceros, lecheros y hortifruticultores del 18% decidida en enero. Un documento que presentó ayer el ministro de Ganadería, Enzo Benech, señala que la medida benefició a 191 de los 647 productores arroceros existentes, a 1761 de los 2741 tamberos, a 667 de los 1289 hortifruticultores, a 448 de los 635 fruticultores y a 9533 de los 10.960 ganaderos.
Endeudamiento.
Los productores pusieron con más energía que otras veces sobre la mesa la situación del endeudamiento. “El sector agropecuario debe hoy el 76% de su producto bruto solo a los bancos. Se debe más del 100%, porque hay más de un 30% de la deuda entre privados. Estamos hablando de una situación crítica. Si usted debe el 100% de lo que produce, y este año se suma la baja de la producción, posiblemente no va a poder pagar ni los intereses”, advirtió Franchi.
Los productores no plantean quitas pero sí entienden que es necesario el estiramiento de plazos. “Nadie quiere no pagar”, aseguró. Franchi destacó que si bien el promedio de la morosidad en el sector agropecuario es del 6% en algunos sectores ya llega al 30%.
Si bien no fue el centro de la reunión de ayer, Franchi dejó claro que el tema del valor del dólar no ha salido de la agenda. “No pretendemos que haya un valor del dólar. Se ha empezado a reconocer por parte de algunos integrantes del Poder Ejecutivo que hay un cierto retraso cambiario y hay organismos internacionales que hablan de un 14 o 15%. Nosotros lo que no queremos es que haya otro 2002 (…) Un atraso cambiario generalmente termina desencadenando una crisis y una devaluación y cuando pasan esas cosas mucha gente queda por el camino. Estamos avisando que estamos viendo un problema”, advirtió Franchi.
El ministro de Ganadería, Enzo Benech, se limitó a decir que “es de recibo recibir propuestas concretas que nos permitan a nosotros sentarnos a revisar y analizar directamente; acá no se trata de ver quién tiene razón sino de ver y analizar documentación. “El compromiso es trabajar, revisar y conversar”, dijo Benech.
El ministro dijo que el Banco República comunicó que dará apoyo crediticio adicional a los productores ubicados en las zonas de emergencia agropecuaria. Además el Instituto Nacional de Colonización anunció que congelará la renta del conjunto de los colonos (hasta ahora solo había tomado esa medida para los lecheros).
Mujica no ve soluciones a corto plazo
El expresidente José Mujica dijo que no ve soluciones a “corto plazo” para la situación complicada de algunos sectores agropecuarios y señaló que el presidente Tabaré Vázquez “hace lo que puede”. En declaraciones a radio Carve, el hoy senador desaconsejó una suba brusca del dólar. Mujica dijo que valora enormemente el aporte de los productores a la producción nacional y reconoció que tienen algo de razón cuando dicen que son incomprendidos, pero les pidió entender que el Estado tiene compromisos de gasto que son “ineludibles”.
Tacuarembó es el que más ración pide
Los datos de solicitudes de ración (básicamente cáscara de soja) realizadas al gobierno por parte de 60 organizaciones gremiales de los siete primeros departamentos declarados en emergencia agropecuaria indican que los productores de Tacuarembó, Salto y Durazno son los más afectados por la sequía. 320 productores de Tacuarembó pidieron 2,9 millones de toneladas, 204 de Salto, 2,4 millones y 194 de Durazno 1,5 millones. También fueron importantes las solicitudes en Artigas (68 solicitantes por 801.408 kilos.
El Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca hizo un llamado a proveedores por 10 millones de toneladas que se puede duplicar. La distribución comenzará después de Semana Santa.
El ministro Enzo Benech reconoció que las expectativas de los rendimientos de la cosecha de soja “son embromadas” porque el déficit hídrico limita el crecimiento y aprovechó para destacar que “por algo desde nuestro ministerio hemos impulsado una ley de riego”. “Debo decir que hay áreas que están muy complicadas y áreas a las que le llovió bien, pero sin duda va a haber perjuicios importantes porque hay mermas de rendimientos y chacras completas que no serán cosechadas”, admitió.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.