Los cinco años de la Red de Raigrás, en una jornada

Una interesante propuesta para mostrar el resultado final de los trabajos realizados en los últimos años, y a su vez tener una mirada de cara al futuro para que el desarrollo de las investigaciones conserven la impronta lograda en este espacio.-

Tal como estaba previsto, el 26 de agosto se realizó la Jornada Múltiple "Raigrás en red", la cual tuvo una conversación central emitida desde Pergamino a distintas Estaciones Experimentales del INTA que a lo largo de los últimos 5 años fueron parte de la Red de Raigrás. Posteriormente en cada uno de esos sitios se realizó una capacitación y salida a campo específica para cada región, cuyo objetivo fue conectar a los asistentes con el resultado de más de cinco años de trabajo evaluando las potencialidades de este cultivo estratégico.

En este sentido Omar Scheneiter, del INTA Pergamino fue el encargado de brindar la charla general que fue seguida atentamente desde las Experimentales del INTA de Mercedes en la provincia de Corrientes; Rafaela en Santa Fe; Concepción del Uruguay, Entre Ríos; Viedma, Río Negro; Anguil, La Pampa; y General Villegas, Bordenave, Chascomús y Pergamino, en Buenos Aires.

La importancia del proceso
En el marco de su presentación, y haciendo referencia al rol del raigrás en cadenas de pastoreo de la región pampeana, Scheneiter explicó que actualmente el “panorama es muy interesante porque se ha volcado mucho esfuerzo para lograr conocimientos desde instituciones, grupos de productores, cámaras semilleristas, que han tomado diversos aspectos tecnológicos. Al final del camino todo esto ha generado un cuerpo de conocimiento que hoy en día nos permite producir eficientemente y conocer muchísimo”.

El especialista, que se desempeña como coordinador del Área Estratégica de Forrajes y Pasturas del INTA, dijo que la Red se convirtió en una “innovación, si entendemos a ésta como un proceso en el que diversos actores van aportando aspectos para que algo que nació desde la teoría, desde un laboratorio, pueda llegar al productor”.

A su vez, Schneiter remarcó como positivo haber descubierto que manejando de una determinada manera el cultivo a campo, se logró mayor producción de leche o carne, “es bárbaro, es una tecnología de proceso desarrollada con muchísimos actores, no sólo un grupo de trabajo. Eso es un ejemplo que sirve para otras especies, para otros aspectos de la actividad agropecuaria”, destacó el especialista del INTA Pergamino.

En este sentido el Ing. Agr. Daniel Méndez, coordinador de esta red nacional de evaluación de raigrás se refirió al gran potencial de esta especie, "de acuerdo con una reciente investigación, se detectaron variedades comerciales con rendimientos superiores a 9.000 kg de materia seca, lo que representa una ganancia de peso de hasta 600 kg de carne”, señaló el profesional del INTA de General Villegas en dónde también se llevó a cabo esta jornada.

Para Méndez, el raigrás cumple un rol “estratégico” al poder ser utilizado en forma directa mediante pastoreo o transferido como reservas. Además, la estacionalidad de su producción permite “integrar rotaciones mixtas sin competir por el uso de la tierra con cultivos agrícolas”.

El futuro es hoy
Adriana Andrés es una de las reconocidas investigadoras que se desempeña en la red, y los asistentes a la jornada en Pergamino tuvieron la oportunidad de tener un somero repaso de las acciones llevadas a cabo por la red, para luego adentrarse en los desafíos futuros en el mejoramiento genético en raigrás anual.

Luego de cinco años evaluando cultivares comerciales en distintos ambientes, con la intención de probar la productividad del forraje Andrés indica que uno de los máximos logros fue “desmitificar  esa idea que dice que el mejor cultivar es el mejor en todos los ambientes y que el peor lo es en todos lados”.

En definitiva estos logros posibilitarán que “el productor tome conciencia que la semilla que está sembrando sea la óptima para ese ambiente específico”.

Además, Andrés brindó una mirada al futuro de la investigación al decir que “estamos signados por las problemáticas globales: hay que trabajar para lograr cultivares que contaminen lo menos posible el ambiente. Por otro lado estamos ante un crecimiento poblacional importante, de gente que quiere comer dietas ricas en proteínas. Y además debemos atender el cambio climático, el estrés térmico que estamos sufriendo tiene que tener soluciones desde la ciencia; en definitiva, hay que desafiar a los ambientes que ya no son futuros sino inmediatos”.

En el campo, los ensayos
Previo a salir al campo, Jonatan Camarasa expuso los principales lineamientos de la investigación sobre raigrás anual en la secuencia de cultivos estivo-invernales durante 5 años.

Con los datos ya presentados, finalmente partió la caravana para ver in situ los resultados obtenidos, los cuales permitieron asegurar que existe una fuerte interacción entre el cultivo y el año.

Pero –aseguró Camarasa- de los tres factores (año, cultivo antecesor y riego o no riego) “el más importante para la producción de pastos al cabo de 5 meses es el cultivo antecesor, y en ese marco si el año es seco el mejor cultivo antecesor es la soja, lográndose 8000 kilos de pasto, versus los 5500 que se logran detrás de un maíz. Si el año es más húmedo las cifras casi que se igualan”.

Finalmente, el investigador del INTA Pergamino dijo que el raigrás se convierte en una oportunidad porque presenta varias ventajas: “Tiene buena resistencia a insectos; cuenta con buena sanidad; y que además si bien produce pastos hacia final del invierno, comparado con otros verdeos de invierno, el raigrás es de mucho mayor producción”.

Dato
En los últimos años, el raigrás anual (Lolium multiflorum) se ha convertido en una alternativa válida como verdeo invernal en los planteos forrajeros, especialmente en la zona húmeda y subhúmeda. Esto se debe en parte al aporte genético de los nuevos materiales que se adaptaron muy bien a nuestras condiciones ambientales presentando altas producciones y una excelente calidad forrajera.