Frigorífico: dicen que hubo cheques sin fondos por 1,8 millones de pesos

Los dueños de la planta dicen que la relación comercial con la firma de capitales rusos expiró el 31 de mayo. Y que a muchos productores se les pagó con valores sin respaldo. La discusión sube de tono en la cordillera chubutense.

Los entretelones de la disputa empresarial por el frigorífico de Esquel tiene distintas facetas que se baten públicamente a partir de la desvinculación de Flexymar SA de la planta de Ruta 259 el pasado 31 de mayo.

Mientras esa firma, de capitales rusos, reclama la restitución de la planta para seguir operándola, Frigorífico Esquel tiene en su poder el documento que acredita que la relación empresarial expiró el 31 de mayo. Hay cheque librados a productores, sin fondos, por la suma cercana a 1,5 millones de pesos y un valor también sin fondos por 300 mil pesos que habría entregado a Frigorífico Esquel.

Pero además, fuentes cercanas al conflicto señalaron que en el punto 2 del acuerdo de concesión de la planta, que comenzó algo más de ocho meses atrás, establecía una serie de compromisos por parte de Flexymar, los
que se garantizaban en el siguiente punto, el 3, que fijaba que de no ser cumplidos se ejecutarían las garantías.

Como la empresa que administra la familia Chornik habría considerado que efectivamente no se habían cumplido los compromisos acordados, se habría aprestado a ejecutar las garantías, y en esas circunstancias la firma de los rusos habría entregado para evitar esa ejecución, un cheque por 300.000 pesos, que no sólo no habría tenido fondos, sino que tendría otras dificultades legales. Del mismo modo habrían entregado cheques sin caja a proveedores, en su mayoría productores, por una suma que ronda 1,5 millones de pesos.

Según las mismas fuentes, Flexymar habría incurrido en la desatención con los empleados al no haberlos advertido que concluía el vínculo con el frigorífico, y que también finalizaban esas fuentes laborales, tal lo plantearon los propios desocupados cuando se enteraron en las audiencias en la Delegación Esquel de la Secretaría de Trabajo.

Además, consideraron que la empresa en cuestión pretendería involucrar a la Municipalidad de Esquel y al Ministerio de la Producción de la Provincia en un litigio entre privados, y habría productores que aún no cobraron por la entrega de animales.

Acciones de Flexymar

Por otro lado, como informamos el fin de semana, Flexymar el viernes en conjunto con los trabajadores y
productores locales presentó un amparo judicial, peticionando la inmediata continuidad productiva del frigorífico, y la urgente restitución de las más de 200 toneladas de mercadería, según la propia firma valuada en 1,3 millones de dólares aproximadamente, y siempre según sus afirmaciones, retenidas de forma ilegal e ilegítima desde el 1º de junio, en cámaras de frío de la planta.

Ayer siguieron las gestiones con presencia en la Municipalidad, donde pugnaban por ser recibidos por el intendente Rafael Williams. Y el viernes se habían reunido con concejales, en una discusión de alto tono que dejó muy ofuscado al presidente del cuerpo deliberativo, Jorge Paz, que decidió no dialogar más con esa empresa, y sí atender si es necesario a los trabajadores.
El enojo fue por la forma de increparlo que utilizó la abogada de Flexymar, Gisela Bustos.

Por lo pronto, el personal estable de la planta está por estos días realizando tareas de mantenimiento de las instalaciones, y también se lleva adelante un inventario de la mercadería que es reclamada por Flexymar. Del
futuro de la producción allí, no se sabe.