La demanda de arándanos de Israel lleva un tiempo al alza, por lo que la oferta y la demanda están desequilibradas desde hace algunos años. Los arándanos nacionales rondan los 20 € el kilo, y en épocas de poca oferta pueden cotizarse hasta un 25% más caros. Incluso los arándanos importados se venden al menos a 15 € el kilo los frescos y a 10 € el kilo los congelados, pero estos precios no disuaden a los consumidores israelíes, puesto que las ventas de arándanos no dejan de aumentar año tras año.
Los productores israelíes hacen lo posible por aumentar la oferta local para satisfacer la demanda y generar una nueva categoría muy lucrativa en el mercado local, pero las dificultades en las condiciones de cultivo se lo han impedido. Actualmente, la mayoría de las plantaciones comerciales de arándanos se encuentra en el norte del país, que sufre condiciones meteorológicas frías en la temporada de cultivo, de modo que los productores esperan que se desarrollen variedades nuevas, más adaptadas al clima local y que permitan que el mercado crezca en los próximos años. Sin embargo, estos desarrollos tendrán lugar a largo plazo, por lo que las actuales condiciones del mercado continuarán al menos esta temporada y la siguiente.
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