Los ganaderos del estado siguen en espera de que el gobierno federal prohíba la entrada al país de productos análogos que se supondría están elaborados con leche, cuando en realidad contienen otro tipo de químicos incluso dañinos para la salud y a precios muy por debajo de lo que cuesta producir lácteos en México, y por tanto respaldan la propuesta del presidente del Frente Nacional de Productores y Consumidores de Leche, Álvaro González Muñoz, quien recién señalo que aceptarían encantados la intención de Donald Trump para que se revise e incluso se reconsidere el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) “porque dejarían de mandarnos sus sobras, como: polvos de leche sin crema, queso y suero de desecho y fórmulas lácteas enriquecidas”.
Esto lo dio a conocer Miguel Ángel Pichini Poloni, integrante de la dirigencia de la Unión Ganadera Regional quien manifestó su respaldo a la propuesta de González Muñoz porque según dijo, quizá para muchos sectores el TLCAN habrá sido favorable pero para la gente del campo no, sino todo lo contrario.
Denunció que las políticas públicas del gobierno federal han opuesto al borde de la desaparición a los pequeños y medianos productores, debido a que con este acuerdo México abrió de manera indiscriminada su mercado interno a productos de Estados Unidos que además de no ser alimentos como se supondría, constituyen una competencia desleal para los mexicanos.
Citó el caso de quesos y varios productos que se venden como leche que provienen del país del norte y que en realidad no están elaborados leche de vaca sino con sueros y otros químicos, y cuyos costos de producción son significativamente más bajos de los que se requieren para producir un litro de leche de verdad.
Esta es una exigencia muy vieja, dijo, pero la autoridad no ha hecho caso y tiene a los mexicanos comiendo plásticos y hormonas; hasta ahora la única respuesta que hemos obtenido es que como estamos en un mercado libre no se puede prohibir la entrada y la venta de estos productos.
Tampoco nos han hecho caso de que a éstos se les pongan en letras grandes en donde se especifique con claridad que se trata de análogos de leche pero ni eso hemos logrado, y siguen engañando a la gente que por necesidad compra lo más barato, sin saber que es un riesgo para la salud.
Y lo mismo sucede con los productores de trigo, el TLCAN nos tiene en la lona con eso de que nos quieren pagar al precio internacional es decir igual que a como se les paga a los norteamericanos, cuando allá ellos otorgan todo tipo de apoyos y nunca les falta el financiamiento, finalizó.

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