La consultora Rabobank estimó un escenario positivo para la industria de carne suína en la segunda mitad del año en curso y para 2014, con un crecimiento limitado de la oferta y un probable aumento en la demanda de China, debido a las temporadas festivas y a un aumento en los precios de la carne bovina y aviar.
Los altos niveles de stock mundiales en la primera mitad de 2013 y el efecto contínuo de las crisis económicas sobre la demanda -principalmente en los países del mundo desarrollado- probablemente limitará el aumento de los precios.
Rabobank se preguntó si la lentitud de los precios de los cerdos y la caída de los costos de los alimentos para su engorde será suficiente para cubrir totalmente las pérdidas productivas registradas en la primera mitad de 2013.
Los índices de precios del cerdo terminado en cinco países se recuperaron en la segunda mitad del segundo trimestre del año en curso, apoyados por mejores condiciones mundiales con impacto limitado en las tasas de cambio.
La consultora estimó también que los valores del cerdo se recuperarán en China, apoyados por la epidemia de gripe aviar H7N9, lo que ocasionó un cambio en el comportamiento de los consumidores, que se volcaron a la carne de cerdo. Los productores tuvieron un mejor margen de ganancia gracias a la intervención del gobierno.
A pesar de los márgenes de producción local negativa, la liquidación del stock fue míminima. Esto ilustra la modernización de la producción suína de China y los subsidios que aplica el gobierno sobre este sector productor de proteínas animales (el cerdo es una carne básica en la alimentación de los chinos).
Al analizar la situación de Estados Unidos, la consultora Rabobank estimó que los precios de la carne suína se recuperarán después de la pérdida de importantes mercados de exportación, debido a un aumento en la demanda y a una oferta menor a lo esperada.
Por otro lado, la diseminación de un nuevo virus -virus de la diarrea epidémica suína- está aumentando y reduciendo la productividad de carne suína, lo que a futuro reducirá la oferta y soportará los precios de la carne suína.
Mientras tanto, en la Unión Europea, la situación debería mantenerse difícil con una presión de los consumidores que perjudicará la recuperación del mercado, a pesar de una menor oferta de las mayores exportaciones. Los mercados de la carne de cerdo se están beneficiando de los altos precios de la carne bovina.
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