URUGUAY : El Ing. Carlos Salgado, analista de mercados del Secretariado Uruguayo de la Lana (SUL) se refirió a los inconvenientes climáticos que afectan a todas las producciones, particularmente la ovina que obliga a las industrias a tomar ciertas medidas para poder abastecerse de materia prima.
“Cuando en Uruguay el nivel de actividad en el mercado de la carne ovina baja generando inquietud e incertidumbre, en otras latitudes, países que en esta producción ya tienen pantalones largos, toman las previsiones del caso para que el nivel no decaiga sino que se incremente, pagando valores diferenciales que sirven de incentivo al productor de carne ovina” dijo el técnico.   
Agregó que “en Nueva Zelanda, principal productor de carne ovina del mundo y donde se faenan 20 millones de corderos al año, las industrias realizan contratos con los productores con valores diferenciados para que en la época de menor oferta (julio – octubre) los mismos – acicateados por el precio – preparen más animales para enviar a las playas de faena•.
En esa época (verano en el viejo continente) “Nueva Zelanda envía a Europa un volumen muy importante de carne de cordero congelada”, precisó, y “para lograrlo las principales industrias ofrecen por un cordero premium con carcasas de 17 kilos y medio valores muy interesantes registrados en contratos que obligan a ambas partes a cumplir estrictamente con ello”, dijo Salgado.
Detalló el analista que por lo general tales contratos tienen “tres valores diferenciales que varían cada 5 semanas (período julio – octubre) algunas inician con US$ 4,80, otras con US$ 5,00, en setiembre escalan de entre US$ 5,20 a US$ 5,50 y finalizan en octubre variando –según la industria- entre US$ 5,20 y US$ 5,40”.
“¿Por qué esos valores diferenciales?” se pregunta Salgado. Porque “el verano europeo es la época en que más se consume carne de cordero y los principales restaurantes de Dinamarca, Francia, Reino Unido y Rusia reclaman carne de calidad y para tenerla hay que pagarla”.
“El contrato obliga a los productores a ofrecer volumen y calidad en las fechas que el mismo señala y generalmente se cumplen con normalidad. Antes de ese período la industria le está pagando a los productores un valor de US$ 4,30 a la carne el kilo de cordero, lográndose como se puede notar  los mejores valores en la época más difícil del año, incentivo para que el productor cumpla con esos contratos”, expresó Carlos Salgado.
MERCADO INTERNO. En cuanto al mercado interno de Uruguay, el especialista indicó que “está con poca operativa, (8.000 animales faenados) precios incambiados y plantas sin operar, los valores que pasan Bamidal, San Jacinto, Las Moras y Carrasco marcan que el borrego de 2 dientes cotiza entre US$ 3,50 y US$ 3,70, el cordero pesado cotiza entre US$ 3,70 y US$ 3,80, el capón cotiza a US$ 3,00 y la oveja lo hace a US$ 2,80”.