viernes, 28 de diciembre de 2012


Mundo más complicado para la Argentina: se frena Brasil y cae la soja

Los nubarrones para la economía local están lejos de disiparse. A las complicaciones que las lluvias de las últimas semanas traen para el avance de la siembra de soja, y que alejan cada vez más las posibilidades de una cosecha récord, se suman ahora que la cotización internacional de la oleaginosa está en el nivel más bajo en casi 5 semanas y que Brasil recortó sus previsiones de crecimiento tanto de este año como del próximo.
De esa manera, los dos motores que impulsaron con fuerza el crecimiento de la actividad local, el empuje de Brasil y los buenos precios y volumen de la soja, aparecen lejos de tener el combustible suficiente para garantizar un 2013 sin sobresaltos.
Los contratos de soja con vencimiento en marzo, los más activos en Chicago, cayeron ayer 10 dólares, o 1,75 por ciento hasta u$s 515,8 la tonelada, el menos valor desde mediados de noviembre, cuando tocó u$s 498,25 por tonelada. Eso a pesar de que persisten las dudas sobre el volumen que tendrá la cosecha sojera en América del sur, en especial en Argentina, donde se estimaban unas 55 millones de toneladas. Tras las tormentas e inundaciones, nadie cree que supere las 52 o 53 millones de toneladas.
Por su parte, el Banco Central de Brasil confirmó la tendencia a la desaceleración de su economía, al reducir de 1,6 por ciento a 1 por ciento la expansión del Producto Bruto Interno (PBI). Esta es la cuarta reducción de estimación de crecimiento económico que hace el Central brasileño para este año, prevista inicialmente en el 3,5 por ciento.
Si se confirma ese guarismo, similar al de la mayoría de los economistas brasileños, el principal socio del Mercosur tendrá en este año que termina el peor resultado desde 2009, cuando su economía se retrajo 0.3 por ciento consecuencia de la crisis internacional.
La combinación de ambos factores tendrá su impacto negativo en el desempeño de la economía local, que ya transitó un 2012 estancado, con una economía que terminará creciendo en torno a 1 por ciento.
Para el año próximo, las principales consultoras económicas del país plantean un crecimiento de la economía entre 2 por ciento y 3 por ciento, de la mano de una supercosecha con altos precios y una fuerte recuperación de Brasil, algo que ahora aparece como una duda.
En el caso de la cotización de la soja (que ayer cerró 3 por ciento por debajo del valor que el Gobierno previó para la soja en el Presupuesto 2013 ?u$s 532 la tonelada?), ayer cumplió la tercera jornada consecutiva de caída en Chicago, y sumó una retracción de casi 6 por ciento.
Buena parte de esa baja estuvo relacionada con la oficialización por parte de China de que cancelaba compras de soja estadounidense por 540.000 toneladas, el mayor volumen en 14 años.
No obstante, también pesó en ese comportamiento un reacomodamiento de los fondos ante falta de precisiones sobre oferta y demanda global prima en los vaivenes del mercado.
El Departamento de Agricultura estadounidense (Usda) recién publicará para el 10 de enero su estimación de cosecha y demanda global de granos y oleaginosas, lo que vuelve más volátil las operaciones en Chicago. Es que los últimos datos oficiales disponibles son de noviembre, cuando el organismo norteamericano informó una cosecha récord en su país, así como previó campañas muy exitosas para América del sur.
El clima afectó el inicio de la campaña sojera sudamericana, aunque en las últimas semanas hubo mejoras para las zonas productoras de Brasil, donde todos los operadores esperan una supercosecha no menor a 80 millones de toneladas. La Argentina apunta a unas 53 millones de toneladas, con una mejora en el clima en el noreste, aunque siguen las complicaciones por inundaciones en buena parte de Córdoba, Santa Fe y Buenos Aires.

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