"La acuicultura presenta ventajas significativas respecto de la pesca tradicional, ya que es una producción totalmente controlada y continua, con trazabilidad desde su inicio", señala un informe del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca (Magyp), y agrega que "se obtienen productos de mayor calidad y se pueden realizar cosechas parciales o totales según la demanda existente en el mercado".
Estas mismas ventajas señala Luis Compagnucci, asesor en producción acuícola, quien además, destacó que en esta actividad se puede mantener vivos los peces hasta el momento de la venta. "En cambio, la pesca requiere mucho gasto de frío [una vez que se capturan y mueren los peces] y su costo operativo en general es mucho mayor."
Compagnucci también señaló a RMN que la acuicultura "puede abastecer al mercado todo el año" y a través de ella se obtienen "productos de calidad uniforme", que pueden ir mejorando a través de la selección genética.
Según los cálculos presentados en el trabajo del Magyp, la Organización para la Agricultura y la Alimentación de ls Organizaciones Unidas (FAO, por sus siglas en inglés) señaló en 2007 que la producción ictícola mundial era de 140,5 millones de toneladas, de las cuales 45,7 millones son de producción acuícola, valuadas en 56.467 millones de dólares.
"Aún cuando en el mundo y también a nivel regional se le da especial importancia a la actividad acuícola, en la Argentina se la considera marginal y no es suficientemente reconocida", dice el informe del Magyp. "Sin embargo, poco a poco, la actividad se abre paso a favor del interés que genera en los productores que la consideran una posibilidad que les permitiría aumentar sus ingresos", concluye el estudio.
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