Australia: Una alternativa a los "snacks" poco saludables

Una empresa de Queensland que se ha propuesto ofrecer una alternativa a los snacks poco saludables admite que está pensando en ampliarla a otros estados de Australia, y a menudo se interesan por su idea en países de todo el mundo. Fruitbar lanzó sus máquinas expendedoras en 2014 y ahora está presente en varios puntos de la ciudad de Brisbane.

"Es algo que siempre sorprende a la gente; bananas y fruta en una máquina expendedora", dice el responsable de marketing de Fruitbar, Mike Evans. "Hay bananas, pero también hay yogures, frutos secos, platos listos para consumir e incluso barritas de proteína o de semillas como alternativas saludables a alimentos muy calóricos".

Fruitbar dice que uno de los desafíos ha sido labrarse una buena reputación y mantener elevados los estándares, pues no se puede permitir suministrar ningún producto que no sea perfecto en cuanto a sabor y calidad. Por tanto, las máquinas se reponen a diario con diversas "frutas de temporada".

"Todavía existe la barrera de que se duda si algo que se compra en una máquina expendedora vaya a estar fresco, así que tenemos que ocuparnos de eso a diario", añade Evans. "Nuestro concepto se basa en el sabor y en la experiencia. Es inaceptable ofrecer un producto que no tenga un sabor excelente".

La empresa es propiedad de la familia Mackay, que produce bananas en Tully, en Queensland Septentrional. Se le ocurrió la idea de vender sus bananas, pero pronto empezó a incorporar una amplia gama de productos.

"El objetivo no es colocar ahí un producto en concreto, nos ceñimos a las temporadas y a lo que es mejor", asegura Evans. "Por tanto, cuando empieza la temporada de la fruta de hueso, ofrecemos melocotones y nectarinas, después nos pasamos a las cerezas y más tarde a las ciruelas, conforme avanza la temporada. En cuanto a manzanas, trabajamos con distintas variedades. También tenemos aguacates, perfectamente maduros y listos para consumir por ahí".

Algo de lo que los consumidores no tienen que preocuparse es la fluctuación de precios.

"Mantenemos un precio estable durante todo el año", continúa. "Unas veces ganamos un poco más, otras veces ganamos un poco menos. Nuestro servicio no es una frutería, somos una alternativa mejor para la hora del snack, así que no competimos con los supermercados tradicionales. Nuestra competencia es una lata de refresco, una barrita de chocolate o una bolsa de papas".

Las máquinas expendedoras están situadas en ocho puntos distintos de Brisbane, y algunas están compuestas por varias máquinas. Evans dice que ha crecido mucho el interés y que la empresa recibe varias llamadas a la semana de clientes potenciales de otros estados de Australia y de todo el mundo, pero primero la empresa tiene que seguir trabajando para consolidar la marca y el producto de forma local.