El clima le suma limitantes a la oferta de trigo

El Gobierno calcula 11,5 millones de toneladas. Pero el volumen podría bajar por efecto de las lluvias.

Mientras los precios en el mercado externo de referencia continúan operando con volatilidad, el mercado local vuelca su atención en lo que sucede con el clima.

Los futuros en Chicago operaron mayormente con subas en respuesta a señales de actividad de la demanda de soja por parte de China y la confirmación de que Ucrania a partir de mediados de noviembre prohibirá las exportaciones de granos.

Entre los productos, el favorecido fue el trigo por la potencial necesidad de que distintos importadores busquen nuevos abastecedores del cereal, cuando Australia también muestra condiciones secas en su región productora y nuestro país de mucha humedad.

 

En las últimas semanas las lluvias registradas están causando complicaciones en los lotes de trigo y en el avance de la siembra de maíz. La actividad está casi paralizada en muchas zonas a la espera de temperaturas más elevadas y clima cálido que permitan secar los suelos y avanzar con las siembras. Igualmente muchos productores están evaluando sembrar el cereal de forma tardía o volcarse con más hectáreas a la soja.

Para el caso del trigo, los sucesivos eventos climáticos (heladas, granizo, vientos y precipitaciones) afectaron a los cultivos limitando el potencial de rendimientos y causando futuras pérdidas de quintales.

La evaluación del impacto del clima en los cultivos es prematura pero se aleja de las estimaciones iniciales que se realizaron respecto de la próxima cosecha de trigo argentino.

Según cifras oficiales del Ministerio de Agricultura de la Nación, la superficie con trigo implantada en la campaña 2012/13 es de casi 3,7 millones de hectáreas, lo que confirma una caída del orden del 20 por ciento respecto del ciclo precedente. El pronosticó de cosecha es de una producción de 11,5 millones de toneladas “en caso de continuar las condiciones normales”, aclara la cartera agropecuaria en su informe.

Con el dato productivo, el informe muestra también un balance de oferta y demanda que proyecta una caída en la molienda del orden de las 300 mil toneladas, hasta 6,1 millones de toneladas, y un volumen de exportación de 5 millones de toneladas. Este dato está por debajo de la apertura anticipada del cupo exportable del 19 de julio, de seis millones de toneladas.

De esta forma se observa que el remanente exportable del cereal está nuevamente atado al volumen de cosecha que, de continuar disminuyendo por el clima, limitará la demanda exportadora.

Al 17 de octubre, el sector exportador había negociado anticipadamente 4,1 millones de toneladas frente a una estimación de ROE ya otorgados por 4,3 millones de toneladas.

El contexto productivo muestra que las cifras mencionadas pueden ajustarse y provocar una retirada del sector exportador ante la incertidumbre de la oferta futura. Mientras tanto, el mercado de trigo está semana mostró una leve mejora en sus valores ofrecidos con negocios que podrían obtener los 260 dólares para diciembre/enero para el cereal con 10,50 de proteína.

*Analista de mercado de Fyo.com ldangelo@fyo.com