domingo, 16 de diciembre de 2012


Mejores condiciones climáticas ayudan a preñar los ganados

URUGUAY : Los veterinarios aseguran que hay menos vaquillonas con falta de celo (anestro), pero la buena oferta forrajera no repercutió en las vacas de cría, donde el porcentaje de anestro es similar al de 2011. Hay otro fuerte crecimiento de la inseminación.
El año pasado se registró un fuerte aumento en el uso de la inseminación artificial a tiempo fijo, pero en la presente zafra, los veterinarios sostienen que se está llegando a un nuevo récord de crecimiento.
Este hecho y el encontrar menor cantidad de vaquillonas en anestro (con falta de celo) que en años anteriores, es el común denominador cuando El País realizó un relevamiento entre algunos de los profesionales que se dedican a medir actividad ovárica en los rodeos y a desarrollar programas de inseminación artificial.
“El porcentaje de anestro en vaquillonas es de 21,7 por ciento sobre 10.411 vaquillonas revisadas, cuando el promedio entre 2003 y 2011 (sobre 51.318 vaquillonas testeadas) fue de 29,6 por ciento”, dijo a El País el doctor Guillermo de Nava, que trabaja fuertemente en los rodeos del norte del país. Antes, prácticamente una de cada tres vaquillonas no presentaba celo regularmente (el ciclo de celo en el bovino es cada 21 días), pero este año bajó.
En vacas de cría el porcentaje de celo es muy similar al de años anteriores. “Es muy difícil en esa vaca que tiene 50 o 60 días de parida encontrar ciclicidad a esta altura”, explicó de Nava. Los profesionales alertan a los productores a no descansarse en un año bueno y piden aplicar medidas de manejo para asegurarse los terneros. “Cuando vienen los años climáticamente buenos, la gente piensa este año se me preña todo y después se lleva las sorpresas”, recordó de Nava.
Por su parte, el doctor Santiago Bordaberry, que trabaja en el centro del país, dijo que “hoy en los diagnósticos nos encontramos con situaciones diversas. Hay gente que está bien y otra que todavía no tiene el partido ganado y depende de que estas últimas lluvias acomoden un poco los ganados pensando en enero”.
El profesional recordó que “estamos mejor que el año pasado, donde a esta altura se instaló un clima un poco más seco y luego una sequía que nos perjudicó mucho”.
De todos modos, que haya llovido “no indica que los ganados estén redondos de gordos. Si bien los ganados parieron bien, hay verde pero el volumen de pasto no está acorde con lo que llovió”, aclaró el veterinario, recordando que aún hay un bloque de parición tardía que se deberá preñar.

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