Fruta de carozo local va a mercado interno por falta de competitividad

SAN JUAN : Hasta el año pasado se exportaron ciruelas, duraznos y damascos desde San Juan. Hoy, salvo excepciones, todo va a mercado interno. En el Mercado Central de Buenos Aires, cuesta $7 un kilo de ciruela elegida, $12 uno de buen damasco y hasta $7 uno de nuestro nectarín.

La temporada de cosecha de las frutas de carozo en nuestra provincia está a pleno, días más días todos los emprendimientos muestran movimiento de cuadrillas, colectivos, tractores, carros, cajones, gancheras y canastos, baldes o recipientes de utilidad para juntar las preciadas frutas. En esta semana, de muy altas temperaturas, visitamos en Zonda, un establecimiento donde se encontraban en plena tarea de recolección de nectarines (duraznos pelones), damascos y ciruelas, todas con destino al consumo en fresco para mercado interno.

Ricardo Bazán encargado de campo, nos comentó que el técnico de la firma Cerro Blanco es el ingeniero agrónomo Adrián Sánchez. En el recorrido a los primeros cuarteles de nectarines, Bazán nos dijo “tenemos muy buena calidad final, en materia de sanidad, casi perfecta y en tamaño también, el inconveniente ha sido este año el viento Zonda que tuvimos a principios de noviembre, con el que se perdió mucha fruta. Era nuestra intención llegar a los 150 mil kilos totales y veremos si llegamos a los 50 y como mucho 60 mil. Pero bueno, lamentablemente son las reglas del juego, en muy poco tiempo se pierde todo el esfuerzo de un año completo de trabajos cumpliendo un cronograma elaborado por los técnicos, con capacitaciones para los operarios y buscando acordar de ajustar todo para dar con la tecla a lo que el comprador quiere; son muy exigentes y hay que cumplir todas las temporadas con sus requisitos”.

El Sol, a media mañana, era fuerte, y los operarios continuaban con su tarea asignada, recolectar los duraznos para el empaque. Omar Torres, el control de cuadrilla para esta fruta, explicó que estaban en un lote de Aniversario INTA, un nectarín que se cosecha para el 4 de diciembre, que es la fecha de creación de esa entidad de investigación y extensión nacional. Nos dijo Torres “este cuartel tiene unos 6 años y da muy buena fruta, está plantado con material de vivero certificado por el INASE y se ha dado mucho mejor que el año pasado”.

Cada temporada en este emprendimiento frutícola se ensayan mejoras en cuanto al uso del riego por goteo, las fertilizaciones (en realidad fertirrigaciones), la poda, los raleos y las aplicaciones para controlar insectos y enfermedades, y se buscan optimizar los resultados económicos.

El jefe de cosecha explicó que “actualmente estamos entre 500 y 600 cajas por hectárea, depende de lo que busque el cliente, ahora es sólo el nectarín rojo, grande en tamaño (sólo mayor de 60 milímetros) y muy bien seleccionado; tal es así que queda fruta en planta, para otra pasada futura. En otros cuarteles estamos llegando a 800 y 900 cajas, para compradores de Buenos Aires, Córdoba, Santa Fe y Mar del Plata”. En este momento llevan 14 días de cosecha y estiman que llegaran a terminar en unos 10 días más.

En cuanto a envases finales, dependiendo del destino final, se envasan nectarines en 8,9 y 14 kilogramos por cajón.

En el galpón de empaque, el movimiento es intenso, allí Bazán destacó +tenemos todas las instalaciones con equipamiento de Albión, de Mendoza, una firma que es reconocida en toda Argentina y en el exterior, y también trabaja en ajos, cebollas, pasas, uvas, manzanas, peras y otros vegetales. También utilizamos seleccionadoras o clasificadoras de Unitec, fabricadas en Cipolletti, Río Negro, muy modernas, y calibramos la fruta según la necesidad del cliente. Las balanzas son Kretz y el final lo hacemos en cámaras de frío, donde la fruta envasada espera el camión refrigerado que la lleva a destino.

En el momento del envasado de los nectarines unas 20 personas, entre mujeres y hombres, trabajaban en esta actividad.

Sufrieron graves pérdidas todas las plantaciones de damascos, ya que el viento les volteó un gran porcentaje (ver recuadro), Tanto en estos Prunus, como en los demás, se está llevando todo a mercado interno, ya que está muy complicado el tema exportación.

A la consulta a los operarios, ellos indican que mientras tengan trabajo, no hay problema, el tema no es mercado externo ni interno, sino mantenerse. Algunos que contestaron dijeron que la mayoría viene de los alrededores, pero también hay gente de Rawson y Capital y si bien es sacrificado, viene muy bien un dinero para las fiestas y eso lo valoran mucho. Además esperan la entrada en cosecha de la uva Superior Seedless, que tiene fecha de inicio aproximado para el 18 de diciembre.

Castell Brite es la variedad de damascos que se cosechaba en el momento de la visita, un cuartel de 10 años de edad, plantado a 6 metros entre líneas por 3 metros entre plantas. Con goteo, raleos y manejo adecuado están arribando a 300 y 400 cajas por hectárea, en el caso de este cliente actual, que es de Santa Fe. Marcia Massut y Lidia Lescano, controles de cuadrilla en esta fruta, indicaron a Suplemento Verde que “en este momento están dejando sólo lo muy verde, todo lo demás se recolecta. Acá se cayó mucho damasco al piso por el viento Zonda, empezamos hace unas tres semanas y calculamos que queda trabajo para una semana. Estamos en calibre 42 para arriba y la fruta está muy buena, grande y sana, lástima que es poca la cantidad. La caja final es de 5 y 8 kilos según destino en el mercado argentino”.

También cuentan con la variedad Katty, en otros cuarteles de la finca.

Finalmente en ciruelas, otro contingente cosechaba un lote de la variedad Royal Zee, donde Alfredo Cabrera de vasta experiencia en este tema, y la encargada de control, Cristina Gambina, indicaron que pensaban llegar a las 1.500 cajas por hectárea. “Entramos con la intención de cosechar todo, digamos al barrer, explicó Gambina, y envasamos en 8,9 y 12 kilos en cada caja terminada en galpón. Buenos Aires es el centro, y de ahí generalmente se distribuye. La fruta tiene muy buen calibre, más de 62 milímetros, está sana y de buen color, atractiva a la vista, que es fundamental. Hoy contamos con 47 operarios para la cosecha de toda la finca y los vamos distribuyendo por necesidad y por urgencia del cliente”.

La fruta que sale de Zonda, se identifica con diferentes marcas, algunas propias y otras son tercerizadas. Entre ellas están Finca Cerro Blanco, Juani, Virgen del Carmen y otras.

Definitivamente, ojalá mejoren las condiciones para esta actividad, que tan difícil momento está pasando en San Juan.