
Programa de capacitaciones iniciado por el Sernanp de la mano con la cooperación española busca desarrollar nodos estratégicos de trabajo para estas eventualidades e incrementar exponencialmente el número de bomberos dedicados las labores de mitigación en los bosques.
En noviembre del año pasado, en una misma semana se desataron incendios forestales en 10 regiones del país. Una situación de emergencia que hizo tronar las alarmas no solo para atender las necesidades inmediatas de mitigación del fuego, sino de entendimiento de qué estaba sucediendo y cómo se había configurado un escenario de tal magnitud.
Para hablar de estos temas, cómo prevenir y cómo atacar el fuego una vez que este se ha desatado, llegó a nuestro país el ingeniero José Ramón Gonzáles Pan, experto español en manejo de incendios forestales del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente de España, quien ha iniciado una labor de reconocimiento y diagnóstico de la realidad peruana con el fin de capacitar a los equipos peruanos que se encargarán de atender estar emergencias.
Gonzáles comenta para Agraria.pe que en este periplo peruano visitó dos escenarios donde hubo incendios significativos recientes. Uno fue el Cusco en la zona cercana al santuario de Machu Picchu, y el otro fue Laquipampa en Chiclayo, donde hubo incendios simultáneos, lo que planteó dificultades extraordinarias al Centro de Operaciones de Emergencia Nacional (Coen) y al Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado (Sernanp).
“Si bien los territorios son distintos (comparados con Europa), las problemáticas son similares”, señala. “Todos los incendios en su porcentaje máximo tanto en España como en Perú son de origen antrópico, es decir humano, y eso tiene mucho que ver con el desarrollo del trabajo rural. El uso del fuego por parte de los humanos para actividades agrícolas y ganaderas es uno de los agentes fundamentales, y a veces las negligencias, el abuso o desconocimiento del daño que puede ocasionar el fuego en una zona cuando el viento llega con fuerza se nos escapa y es ingobernable”.
El especialista, que llegó pedido del Ministerio del Ambiente de Perú y gracias a la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), hace hincapié en que no basta con prohibir la quema de deshechos vegetales entre los agricultores, sino que hay que entender por qué y cómo lo hacen, buscando fórmulas para que esa acción no termine dañando las reservas naturales o áreas protegidas.
El objetivo de las capacitaciones en el país, agrega, es que los guardaparques del Sernanp actúen de manera inmediata antes de que los incendios se tornen graves. En ese propósito, seis especialistas peruanos viajarán a Europa a conocer la experiencia española en este campo de tal forma que se conviertan en líderes de formación. En una etapa final, un grupo de técnicos españoles llegará a Perú para intensificar el intercambio de conocimientos para desarrollar estrategias de planificación y prevención en escenarios complejos.
El rol del clima
Otro factor a tener en cuenta ahora es el clima, pues la temperatura está subiendo en todo el mundo, lo que ayuda a que los incendios sean más voraces que antes a pesar de que en número puedan ser menores que hace 20 años, como en el caso de España. En el ámbito peruano está la particularidad del Fenómeno del Niño, que también incide en estos casos.
“Los Fenómenos del Niño han provocado que grandes zonas desérticas que normalmente no disponen de vegetación herbácea, con las lluvias, tengan ahora mismo una cubierta de vegetación que se ha secado y se convierte, como decimos en España, en yesca pura, una simple cerilla es capaz de prender grandes superficies. Todos estamos preocupados por las oscilaciones climáticas que aumentan los periodos de sequía, eso somete a las plantas a estrés hídrico, lo que provoca que se sequen y se conviertan en combustible fácil para el fuego”, explica.
De esta manera, los ecosistemas se han vuelto mucho más frágiles. Y tanto es así que un evento como la Conferencia Internacional de Incendios Forestales del 2007 en España recibió a 80 países invitados, cuando lo regular era que asistieran entre 40 a 50. “Nos quedamos perplejos viendo que muchos países que antes no consideraban los incendios forestales como importantes, empezaron a tenerlos, y Perú empieza a tener un problema similar”, recuerda el vocero.
Nodos a nivel nacional
En el escenario nacional, Gonzáles valora el trabajo del Sernanp que cuenta con un equipo de bomberos muy reconocido que es incluso requerido del extranjero, por ello, el número de sus integrantes pasará, luego de este proceso de capacitación, de los 30 actuales a un total de 150. De esa manera no sucederán situaciones como el traslado que tuvieron que hacer estos especialistas desde Cusco hasta Chiclayo cuando el fuego atacó esa zona del norte peruano.
En total, revela el especialista, serán cuatro nodos a nivel nacional en los que se trabajará. Uno de ellos será Cusco, el otro Chiclayo, el tercero probablemente será Lima, y un cuarto todavía está en definición. La idea es que se pueda abarcar un campo de acción en costa, sierra y selva, una geografía retadora.
“El territorio complejo es la sierra, las altitudes que tienen nos asombran. El otro día estuvimos a 3.800 metros y que haya gente capaz de trabajar a esas alturas es para quitarse el sombrero. Están las pendientes donde ningún dispositivo puede entrar, pero hay gente que lo hace, puede subir y bajar sin problemas, es el pueblo inca en toda su dimensión. La selva tiene la complejidad de su amplitud y dispersión de las poblaciones”, señaló.
Todo este trabajo, concluye, trata de cubrir necesidades, y entre ellas está la falta de indicadores específicos en nuestro país: “En Perú hace mucha falta una estadística real, buena y eficaz de los incendios forestales, sería el gran tesoro para conocer el suceso y tener soluciones más eficaces”.
Dato
Para el ingeniero José Ramón Gonzáles, la tecnología y los medios de comunicación son grandes aliados en la mitigación en prevención de incendios forestales. Señala, por ejemplo, que gracias a las imágenes satelitales, hoy se puede tener alerta temprana de incendios en zonas de la selva peruana antes insospechadas. Por su parte, la ciudadanía también juega su rol, ya que en España, el 46% de casos de incendios de este tipo es avisado por la población a través de los teléfonos celulares antes que por los sistemas de detección.
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