Buzzi: "Lo de La Rural es una sobreactuación política y una venganza de la Presidenta"

El líder de la Federación Agraria se refirió al paro que llevaron a cabo ayer las entidades agropecuarias en contra de la expropiación del predio; "No nos van a callar", aseguró.

El líder de la Federación Agraria Argentina, Eduardo Buzzi, se refirió a la medida de fuerza que mantuvieron ayer entidades agropecuarias en contra de la estatización del predio de La Rural que el Gobierno intenta llevar a cabo, y aseguró que la decisión de la Casa Rosada se produjo por rencor contra el sector.

"El caudal que la Presidenta obtuvo en votos lo está usando para vehiculizar rencores, para como revancha desde una posición de soberbia", aseguró. "Ahora viene esto de La Rural que es una sobreactuación política", agregó, en diálogo con el programa A dos voces, que transmite la señal TN.

Y destacó que el sector agrario es uno de los principales pilares de la economía en la Argentina. "Nos ponen como enemigos cuando somos parte de la solución. Somos parte de la generación de uno de cada tres puestos en la Argentina. ¿Por qué hacer de ese sector el enemigo?", se preguntó. Y acotó: "Es irracional".

Por último, aseguró: "No nos van a callar, por más que hagan esto y muchas cosas más".

Más temprano, el presidente de la Sociedad Rural Argentina, Luis Miguel Etchevehere, explicó a RMN que el paro no sólo es en contra de la estatización del predio de Palermo, sino también contra el retiro a la FAA de la administración de un certificado de depósitos de granos, la intervención del Registro Nacional de Trabajadores Rurales (Renatre) y las acciones de "intervención" del Gobierno contra el campo.

Esta noche, además, la SRA convocó a la ciudadanía a cantar mañana, a las 19, el Himno Nacional frente al mástil del predio de Palermo.

La semana pasada, el Gobierno decidió anular el decreto 2699 de 1991, que fijó la venta del predio de 14 hectáreas a la entidad. Según el jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina, esa operación fue "irregular" y se realizó "a un precio vil".

La venta fue fijada en 30 millones de dólares con el compromiso de que la SRA debía modernizar ese predio para que se utilizara como sede de exposiciones, ferias y congresos. Etchevehere dijo que se pagó el 80% de ese precio hasta 2002 y que por la devaluación de ese año la entidad intentó, sin éxito, renegociar con el Gobierno el saldo pendiente..