Una nueva etapa del plan de demolición y revancha

Menos al kirchnerismo, el tiempo le cicatriza las heridas a todo el mundo. Ahora es obvio que los más de cuatro años que pasaron desde que sufrió la derrota por la resolución 125 no fueron suficientes como para aplacarle la sed de revancha. Y si se toma lo ocurrido la semana pasada con la confiscación del predio ferial de Palermo a la Sociedad Rural Argentina y la eliminación del mecanismo de formularios 1116, de impresión de los certificados de acopio, a la Federación Agraria, pareciera que el tiempo lejos de hacerle olvidar a Cristina Kirchner los malos tragos, se los revive y exacerba.

Sin embargo, para tener una exacta evaluación del manotazo a las 14 hectáreas de Palermo es necesario tener en cuenta que no es un hecho aislado, sino un proceso que se inició en la mismísima madrugada del 17 de julio 2008 del "no positivo" del entonces vicepresidente Julio Cobos.

Lejos de cerrar un capítulo y abrir un diálogo constructivo con los dirigentes del campo, como para aprovechar un escenario internacional pocas veces tan favorable para la producción agroalimentaria, los Kirchner iniciaron una revancha que tiene como único objetivo la demolición de la representación del campo en todas sus formas.

A la luz de los hechos, no parece exagerado Eduardo Buzzi, presidente de la Federación Agraria, cuando dice que el Gobierno les terminará sacando hasta el apellido.

Los Kirchner entendieron de inmediato que la forma más efectiva para llevar a cabo esta tarea era pegar a las entidades del campo en su flanco más débil: los recursos financieros.

Ya en noviembre de 2008 van sobre Coninagro, su primera víctima, a la que le sacan una de las columnas de su edificio. En efecto, presionan a Sancor para que abandone la entidad después de 40 años y pierdan su apoyo financiero, el segundo en orden de importancia después de la Asociación de Cooperativas Argentinas (ACA).

A la empresa láctea, que estaba muy condicionada económicamente, la pusieron a optar entre la Mesa de Enlace y su supervivencia. Se jugaban la cobranza de millones de dólares de reintegro de exportaciones que le debían y la oportunidad de realizar negocios con Venezuela. A duras penas Coninagro soportó el golpe, pero debió repartir nuevamente las cargas financieras sobre el resto de las cooperativas afiliadas.

En 2009 continuó la embestida, esta vez contra la Federación Agraria (FAA), sacando la emisión de las cartas de porte para el transporte de granos. Logran rebanarle cerca de siete millones de pesos al presupuesto de la entidad. Fue un primer paso que se completó la semana pasada con la modificación del mecanismo de formularios 1116, que significa una poda del 50% de los recursos de los federados. "Esto pone a 40 familias en vilo, es una situación muy desagradable, que tenemos que afrontar", confesaba un alto dirigente.

En 2011 el Gobierno se distrae de su tarea sistemática y demoledora contra las entidades del campo y toma el control del Renatre, la entidad que manejaba el dirigente de los peones rurales Gerónimo Venegas, acérrimo opositor al gobierno. Se queda con una caja de 50 millones de pesos anuales.

El plan de revancha kirchnerista tampoco tuvo miramientos con Confederaciones Rurales Argentinas (CRA). Este año el Senasa ordenó a las oficinas que tiene en las sociedades rurales del interior que se retiren del lugar que comparten con los productores y busquen un espacio propio. No fue un golpe a las finanzas, sino un intento de vaciar de productores a las rurales locales

Por último, la confiscación del predio de Palermo y la imposibilidad de obtener los ingresos de la tradicional exposición ganadera significan una pérdida de más del 20% de los ingresos anuales de la Sociedad Rural Argentina

Por más que su presidente, Luis Miguel Etchevehere, dijo que no le tienen miedo al Gobierno y van a seguir cantando sus verdades, "aun arriba de un cajón de manzanas", lo cierto es que sin recursos es imposible la acción gremial de las entidades.

No hay forma de financiar los trabajos que demuestran, por ejemplo, el aumento de la presión tributaria. Sin recursos no es posible darles voz a los que no tienen voz.

Y la revancha kirchnerista consiste en imponer una sola voz, que sea cantante y sonante.

RESUMEN

• 80%
  Siembra de soja
  Sobre una superficie estimada de 19,7 millones de hectáreas. Según la Bolsa de Cereales de Bs. As.

LA FRASE

• "Yauhar repite como un loro el libreto oficial sin aportar soluciones"
  Pedro Apaolaza
  Vicepresidente CRA

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