Un nuevo negocio busca mejorar la confianza entre ambos actores
Un grupo de importadores europeos se ha embarcado en la misión de convencer a los exportadores de fruta en que confíen en el mercado francés. 
Richard Frowein, co-fundador de Geckco Fruits conversó con www.portalfruticola.com acerca de los desafíos en el mercado francés y de cómo ir construyendo la confianza en este mercado.
“Todos los exportadores temen enviar fruta al mercado francés, tienen miedo de tener problemas con la calidad, con los pagos o desacuerdos en los precios que tenían antes de la temporada”, dice.
“Todos los importadores en Francia están perdiendo dinero año a año. El costo de emplear personas en Francia es bastante alto. Así que hoy en día, el mantener una importadora de frutas, es bastante difícil de manejar, así como pagar todos los gastos que tendrás cada mes”, agrega.
La falta de confianza de los exportadores, sumado a los problemas de importación se traducen en una brecha en el mercado. Frowein explicó que en un país como Francia, en donde las personas esperan frutas y hortalizas todos los días, los consumidores se quedan con ganas de más.
Es de estos vacíos dentro de la cadena de suministro en donde la idea de Gecko encontró su origen. Gracias a su amplia experiencia en temas relacionados al flete marítimo, Richard Frowein decidió colaborar con el especialista en frutas exóticas Arnaud Fauchet para abastecer con frutas más baratas durante todo el año a los consumidores franceses.
Frowein nos indica que los años de llevar fruta al mercado para competir en este terminaron para él. “Hoy en día tienes que organizar bien en qué momento vas a estar en el mercado y si tienes un cliente para la fruta puedes importar”.
El importador nos explica que Gecko Fruits trabaja para eliminar la incertidumbre en el mercado francés. En vez de enviar el producto a través de vendedores holandeses, Frowien y Fauchet han establecido arribos más directos al mercado.
Han establecido relaciones con exportadores de Chile, Argentina, Perú, Ecuador, Brasil y Sudáfrica y los importadores de estos países contarán con destinos claros en el mercado Francés, eliminando así cualquier incertidumbre en ambos lados de la cadena. De esta forma los mercados pueden contar con un flujo más confiable del producto y los consumidores pueden llegar con una mayor certeza a los consumidores.
Actualmente Gecko está a la espera de su primer embarque de mangos desde Perú. Antes que finalice el año la empresa también recibirá cerezas chilenas y uvas sudafricanas.
Frowein estima que cerca de la mitad de los importadores franceses trabajad con vendedores holandeses. Él espera que una vía más directa con Francia genere precios más baratos y una mayor satisfacción en los compradores y vendedores.
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