Uruguay se consolida en la élite del mercado internacional de carnes
La decisión de Corea del Sur de habilitar el ingreso de carne vacuna fresca desde Uruguay consolida al país dentro de la élite del mercado, señaló Alfredo Fratti, presidente del Instituto Nacional de Carnes (INAC), en momentos de incertidumbre sanitarias en la región.
Dicho hito para el mercado uruguayo –el séptimo exportador de carne en el mundo– se produce en un año en el que el país superará su récord de ingresos de divisas por exportación de carne, con unos 1.750 millones de dólares, un 8 por ciento superior a los ingresos de 2011.
“El ingreso a Corea definitivamente posiciona a Uruguay como uno de los principales jugadores del mercado internacional, desde el punto de vista del status porque hay que ver que Corea tuvo que hacer una excepción ya que Uruguay es el único país que vacuna contra la aftosa y consigue venderle a Corea”, señaló Fratti.
Para Fratti “en los primeros meses de 2013 se concretarían las primeras ventas hacia Corea”, un hecho que se producirá luego de que el país sudamericano recorriera un intenso camino de negociaciones que “se inició en 2006 con la reapertura de la embajada uruguaya en Corea”.
La exportación cárnica –histórico motor de la economía uruguaya– vive años de bonanza colocando sus productos a precios elevados en los mercados internacionales alcanzando en los primeros once meses del año los 1.287,8 millones de dólares por venta de carne bovina, desde los 1.205,3 millones registrados en igual período del año anterior.
“Durante todo el año tuvimos precios similares a los que vende Estados Unidos y Australia, cuando históricamente vendimos por décadas por debajo de estos países. Mantener esto es uno de los objetivos del año que viene”, agregó Fratti.
Más allá del “valor simbólico” la apertura del mercado surcoreano “va a tener un valor de mercado concreto, ya que consolida un panorama de mucha estabilidad en el sector cárnico uruguayo, como nunca antes lo tuvo”, comentó Eduardo Blasina, director de la consultora Blasina y Asociados.
La entrada de la carne bovina a Corea del Sur es en parte el resultado de “las fortalezas que tiene el país, en especial su seriedad en materia sanitaria”, destacó Fratti.
En ese aspecto juega un papel fundamental el sistema de trazabilidad adoptado por el país, sistema que sigue a cada bovino desde que nace hasta que es faenado, que transformó a Uruguay en la única nación con todo su rodeo –formado por 11,5 millones de cabezas de ganado vacuno– identificado individualmente.
El positivo status sanitario de Uruguay –que desde 2003 es país libre de aftosa con vacunación según la Organización Internacional de Sanidad Animal– contrasta con los brotes de aftosa que sufrió Paraguay este año y con la reciente aparición de un caso de “vaca loca” atípica en Brasil, que llevó a Japón, China y Sudáfrica a suspender el ingreso de carne bovina desde el gigante sudamericano.
“El ingreso a Corea definitivamente posiciona a Uruguay como uno de los principales jugadores del mercado internacional, desde el punto de vista del status porque hay que ver que Corea tuvo que hacer una excepción ya que Uruguay es el único país que vacuna contra la aftosa y consigue venderle a Corea”, señaló Fratti.
Para Fratti “en los primeros meses de 2013 se concretarían las primeras ventas hacia Corea”, un hecho que se producirá luego de que el país sudamericano recorriera un intenso camino de negociaciones que “se inició en 2006 con la reapertura de la embajada uruguaya en Corea”.
La exportación cárnica –histórico motor de la economía uruguaya– vive años de bonanza colocando sus productos a precios elevados en los mercados internacionales alcanzando en los primeros once meses del año los 1.287,8 millones de dólares por venta de carne bovina, desde los 1.205,3 millones registrados en igual período del año anterior.
“Durante todo el año tuvimos precios similares a los que vende Estados Unidos y Australia, cuando históricamente vendimos por décadas por debajo de estos países. Mantener esto es uno de los objetivos del año que viene”, agregó Fratti.
Más allá del “valor simbólico” la apertura del mercado surcoreano “va a tener un valor de mercado concreto, ya que consolida un panorama de mucha estabilidad en el sector cárnico uruguayo, como nunca antes lo tuvo”, comentó Eduardo Blasina, director de la consultora Blasina y Asociados.
La entrada de la carne bovina a Corea del Sur es en parte el resultado de “las fortalezas que tiene el país, en especial su seriedad en materia sanitaria”, destacó Fratti.
En ese aspecto juega un papel fundamental el sistema de trazabilidad adoptado por el país, sistema que sigue a cada bovino desde que nace hasta que es faenado, que transformó a Uruguay en la única nación con todo su rodeo –formado por 11,5 millones de cabezas de ganado vacuno– identificado individualmente.
El positivo status sanitario de Uruguay –que desde 2003 es país libre de aftosa con vacunación según la Organización Internacional de Sanidad Animal– contrasta con los brotes de aftosa que sufrió Paraguay este año y con la reciente aparición de un caso de “vaca loca” atípica en Brasil, que llevó a Japón, China y Sudáfrica a suspender el ingreso de carne bovina desde el gigante sudamericano.
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