Argentina alcanzó un acuerdo con la Unión Europea (UE) para ser uno de los seis países que se disputarán una cuota anual de exportación por 48.200 toneladas de carne vacuna de alta calidad sin que los importadores deban pagar aranceles, dijo el viernes el Ministerio de Agricultura en un comunicado.
El país sudamericano es uno de los principales exportadores mundiales de carne vacuna, aunque el sector ganadero viene de una larga crisis que llevó a una reducción del rodeo en los últimos años y que en ocasiones le ha dificultado cumplir con otro cupo de exportación a Europa conocido como cuota Hilton.
Los países que competirán para acceder al cupo -conocido como Cuota 481 o ‘Feed-Lot’, ya que rige para la carne de bovinos alimentados a corral- son Estados Unidos, Australia, Canadá, Nueva Zelandia, Uruguay y, ahora, Argentina.
“Es importante resaltar que, a diferencia de la Cuota Hilton, la 481 no es asignada en porciones a cada una de las naciones participantes, sino (que) se trata de una cuota general por la que compiten los países habilitados”, señaló la cartera agrícola de Argentina.
El cupo exime a los importadores europeos del pago de aranceles, lo que les permite abonar precios más altos por sus compras de carne extranjera.
La medida, que fue publicada en el boletín oficial de la UE, entrará en vigencia a partir del lunes, explicó el ministerio argentino.
“El cupo cárnico será distribuido en cuatro trimestres de 12.050 toneladas cada uno, de junio a julio, siguiendo el calendario agrícola”, dijo sobre la nueva cuota el Ministerio de Agricultura en su comunicado.
En agosto, la producción argentina de carne vacuna totalizó 217.000 toneladas, lo que representa una caída interanual del 8,9 por ciento, principalmente debido a una merma en el peso promedio de los bovinos, según datos de la Cámara de la Industria y Comercio de Carnes y Derivados (Ciccra).
En los primeros ocho meses del año, la producción fue de cerca de 1,8 millones de toneladas, un 5,1 por debajo de igual período de 2013, de acuerdo con Ciccra.
Los embarques de carne bovina argentina cayeron significativamente en los últimos años luego de que el Gobierno limitó las exportaciones del alimento para garantizar su abastecimiento doméstico y sus precios, un tema sensible para los argentinos.
Argentina es también uno de los mayores proveedores internacionales de granos y derivados, en especial de soja y maíz.
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