28 de septiembre de 2014.- Aguascalientes, Ags., (OEM-Informex).- El mayor problema del sector lechero radica en que hoy por hoy no existe una regulación que restrinja o limite la distribución y comercialización de productos de baja calidad, subrayó ayer el ganadero Miguel Urrutia Soto, quien dijo que la explotación establera sigue atravesando por serios problemas económicos y también con dificultades para colocar leche fresca o procesada.Sostuvo que en el mercado local se siguen ofertando productos como grasas vegetales o de polvo, que no son 100 por ciento lácteos, que implica un verdadero engaño a los consumidores, quienes prefieren comprarlos porque son más baratos.
El precio bajo implica para los productores lecheros una competencia desleal, de ahí la necesidad de que las autoridades coadyuven para generar candados que garanticen que la competencia será calidad por calidad a precios justos, enfatizó enseguida.
Urrutia Soto añadió que “en el sector lechero tenemos el mismo problema que con todo el sector de ganadería, hoy a México se importa más de 50% de los productos lácteos y eso ha generado que muchas de las cosas, no sean leche sino que son sueros y son grasas vegetales con las que engañas diciendo que son de producto animal”.
Aseveró en entrevista que en todos los sectores del campo sufren de competencia desleal, pero existe unión entre los productores para evitar que productos “falsos” que se ostentan de origen animal, afecte al sector y sobre todo a los consumidores.
Es evidente que los consumidores buscan productos de calidad, no es posible que les vendas gato por liebre, ellos mismos se dan cuenta, “desgraciadamente por los precios excesivamente bajos que a veces manejan es que nosotros nos vemos rezagados”.
La rama lechera y la propia industria pasteurizadora viene trabajando contracorriente desde hace varias décadas, aproximadamente medio siglo, ya que desde entonces la producción de alimentos para consumo propio han ido a la baja, por lo que las importaciones han crecido.
Comentó que de acuerdo con la FAO (Organización de Alimentos y Agricultura de la ONU) el ideal es que cada país produzca al menos 65% de los alimentos que consume, por lo que México debería tener la meta de aumentar su producción en 20% para cumplir con esa premisa.
Respecto al presupuesto que se asigna al campo, dijo que actualmente se cuenta con el apoyo del Gobierno del Estado y también del propio Gobierno Federal, es decir, existe el respaldo suficiente de las dependencias e instituciones involucradas, pero deben aplicarse estrategias más agresivas para garantizar la seguridad alimentaria de los mexicanos.
El ganadero lechero subrayó que la Reforma Fiscal ha venido a mermar la economía de los propietarios de establos y unidades pecuarias en general, “pero esperamos que con un incremento sustancial en los programas agropecuarios, estos daños puedan ser mermados”.
Es importante que se requieren inversiones frescas en el campo, “pero nosotros queremos ajustes a las normas oficiales y sobre todo igualdad”. La ganadería lechera debe no solamente mantenerse, sino incrementar su producción y productividad para seguir garantizando la alimentación de la población mexicana.
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