El Instituto Colombiano Agropecuario, ICA, implementará un plan de trabajo para suprimir y controlar la Mosca del Mediterráneo (Ceratitis capitata), particularmente en aquellas zonas en las cuales se ha reportado su presencia y con alto riesgo de dispersión para el resto del país, tal como acontece con las poblaciones existentes en Norte de Santander, Atlántico y Bolívar.
El plan de acción concentrará sus labores en estos departamentos, principalmente en la provincia de Pamplona, departamento de Norte de Santander, en donde esta plaga viene afectando cultivos comerciales de durazno, ocasionando su dispersión a otras regiones del territorio nacional en donde nunca se ha presentado, a través de la comercialización de la fruta desde esta región.
Tal es el caso de los brotes recientes detectados en la Central de abastos en la ciudad de Bogotá, en donde gracias a las labores de vigilancia y control del Instituto, enmarcadas en el Plan Nacional de Mosca de la Fruta, se encontró en la red trampeo la presencia de adultos de esta mosca, lo que desplegó una fuerte investigación que permitió establecer que la plaga llegó a través de la comercialización de duraznos infestados procedentes de Norte de Santander.
Ante la situación, el ICA, con el apoyo logístico de otras entidades como Asohofrucol y Corabastos, inició una brigada de trabajo que incluyó el monitoreo de árboles traspatio de durazno, manzanas, café y otros frutales alrededor de barrios urbanos de la ciudad, encontrándose larvas de esta plaga en una baja población, principalmente en duraznos.
“La incidencia de la plaga en Bogotá se mantiene estable pero permanente, en un área de 2.500 hectáreas alrededor de la central de abastos. Actualmente se continúa delimitando el brote para conocer el área total afectada y se ha empezado una campaña de control y supresión”, señaló Emilio Arévalo, Director Técnico de Epidemiología y Vigilancia Fitosanitaria del ICA, quien agregó que “el objetivo primordial es proteger la producción frutícola de varias regiones del país, como las de Cundinamarca y Boyacá”.
“Para avanzar en su objetivo, el ICA declarará en el corto plazo una emergencia fitosanitaria, lo que permitirá adelantar un Plan de Supresión de esta mosca. Este trabajo se llevará a cabo de forma paralela, tanto en Norte de Santander, en donde está la fuente primaria de ese brote, como en Bogotá, con el fin de que el insecto no se disperse a áreas en las cuales, de acuerdo al sistema de vigilancia, aún no se reporta su presencia”, agregó por su parte el gerente general del ICA, Luis Humberto Martínez Lacaouture.
En el municipio de Pamplona se tiene programado realizar un censo frutícola, para lo cual se espera inscribir o registrar a todos los productores de frutas, lo que facilitará la implementación del Plan y la aplicación de las medidas de manejo de la mosca del mediterráneo. De igual manera, se restringirá la movilización de fruta afectada por la plaga.
Por su parte, en la ciudad de Bogotá se intensificará el trampeo para el monitoreo de delimitación de esta plaga y se continuará con el muestreo de frutos en las áreas de traspatio alrededor de corabastos, dándole continuidad a las medidas de supresión que se vienen ejecutando, mediante la aplicación de estaciones cebo en el área afectada.
Fuente: Instituto Colombiano Agropecuario – ICA
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