La semana pasada, el primer ministro de Nueva Zelanda, Bill English, se encargó de poner en marcha la mayor línea automática de clasificado y calibrado de kiwis del país, en la empresa EastPack, en Te Puke.
La nueva clasificadora de frutas de 14 líneas de Compac es la primera de la industria que tiene más de 10 líneas. Es capaz de envasar 100.000 bandejas en cada turno, el equivalente a más de 40 millones de bandejas de frutas de todo el sector.
Esta inversión ha costado casi 25 millones de dólares y la nueva clasificadora ha creado empleo para 300 trabajadores temporales, con lo que la plantilla total de la planta ya asciende a 600 empleados.
"Gracias al aumento del volumen, hemos podido invertir mucho más en infraestructuras y tecnologías nuevas, con más de 40 millones de dólares solamente este año que se suman a los 25 millones de dólares del año pasado", explica el director ejecutivo de EastPack, Hamish Simson.
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