Según informaron los directivos de la cooperativa, esta reestructuración se implementará en los próximos días y afectaría a 200 trabajadores de las plantas ubicadas en las localidades de Binkmann y Coronel Moldes en la provincia de Córdoba.
Como adelantó LPO, en la primera etapa de la reestructuración los despidos y suspensiones afectaría a 500 trabajadores entre Córdoba y Santa Fe y otros 1.000 podrán verse afectados en etapas subsiguientes.
A raíz de esta reestructuración, Córdoba implementará un subsidio a los trabajadores despedidos que contempla el pago por un año del equivalente a un Salario Mínimo Vital y Móvil que actualmente está establecido en $8.060. Este subsidio se mantendrá por 12 meses y lo percibirá aunque logre incorporarse a un nuevo empleo.
De igual manera, los operarios suspendidos accederán a esa ayuda económica en las mismas condiciones, por el tiempo que dure la suspensión.
Los salarios de los lecheros es nueve veces el salario mínimo en promedio, gracias a un aumento del 40% que convalidó la empresa este año y que le valió la negativa del Estado nacional de una nueva asistencia económica y la obligación de esta nueva reestructuración.
Sobre la medida, Avalle declaró: “el Estado provincial se hace presente en una situación de emergencia, en localidades muy pequeñas, en donde las posibilidades de acceder a nuevos puestos de trabajo pueden ser más difíciles. Mientras tanto iremos explorando otras posibilidades en relación a la mano de obra que pudiera quedar desempleada”, aseguró el funcionario.
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