La carne mexicana no cuenta con una clasificación que la diferencie pese a que se produce bajo el mismo sistema que se usa en Estados Unidos, por lo que pierde valor en el extranjero.
La carne de res mexicana de exportación se vende entre cinco y 30 por ciento más barata en el extranjero, frente a competidores de Estados Unidos, debido a que no cuenta con una marca de calidad que los respalde como es el caso de las clasificaciones: US Choise, US Select, US Prime, US Standard, US Commercial, US Cutter y US Canner, lamentó el director de comercio exterior de la Asociación Mexicana de Engordadores de Ganado (AMEG), Rogelio Pérez.
Por eso, la AMEG trabaja en una norma de clasificación que mide la fase entreverada, el color de la grasa y la edad del animal a la hora de su sacrificio, anticipó Pérez durante la presentación del Congreso Internacional de la Carne organizado por la AMEG y que se realizará del 5 al 7 de abril en la Ciudad de México.
Esto, a pesar de que la carne mexicana de exportación se produce bajo el mismo sistema que se usa en el vecino del norte y cuenta con estándares de calidad similares; sin embargo, no tiene con una clasificación o marca que la diferencie, cómo si ocurre en Estados Unidos.
Pérez reconoció que uno de los obstáculos que han enfrentado para desarrollar una norma de clasificación de carne mexicana es la marca Hecho en México, que cuenta con dos tipos de producción: el intensivo, que se desarrolla en el norte y con el que se alimenta con granos a las reses; y el extensivo, que se ve mayormente en el sur y en el que la alimentación se basa en pastizales, pero que es más tardado.
Para este año la AMEG espera un repunte en el consumo per cápita de carne de res, que se ubica en cerca de 15 kilogramos al año, debido a la capacidad que tiene la industria de aumentar la oferta.
“Como resultado del programa de repoblamiento de ganado en México se recuperaron hembras y empezó a salir más ganado. Vimos que en México se elevó la oferta de ganado y efectivamente el precio del ganado fue un tanto más adquisitivo, el precio en los corrales de engorda está llegando a los 42 pesos”, dijo Enrique López, director de la AMEG
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