El sector frutícola alemán es abastecido cada vez más por productores húngaros. En el caso de la fruta de hueso y los pimientos en particular, Alemania es un mercado de exportación muy importante para los productores de las zonas de cultivo de Centroeuropa. Las ventas de la cooperativa Fresh Fruit Tész del sur de Hungría también tiene una gran clientela en la República Federal y suministra principalmente ciruelas damascenas, guindas y pimientos de tipo italiano. Sin embargo, actualmente, la competencia en el este de Europa es especialmente fuerte, afirma el propietario Juhos Csaba. Los países de los Balcanes, en particular, están ganando terreno claramente.
Ahora, durante los meses de invierno, Csaba y sus colegas están relativamente tranquilos. Este es uno de los motivos por los que los comerciantes húngaros están bien representados en la feria Fruit Logistica, tratando de adquirir nuevos clientes alemanes. Puesto que comienza en junio, la temporada de exportación volverá a empezar y los aproximadamente 430 productores de la región de Bács-Kiskun cosecharán, seleccionarán y envasarán grandes cantidades de frutas de hueso y pimientos italianos para los mercados de toda Europa. "Las ciruelas damascenas no nuestro principal producto de exportación", detalla Csaba. "En alrededor de dos meses y medio, produciremos unas 3.000 toneladas, que venderemos en toda Europa, desde Lituania hasta Países Bajos".
Competencia
En comparación con otros productos, la competencia en el negocio de las ciruelas damascenas es bastante elevada. Esto se debe a que muchos productores de la antigua Yugoslavia y Polonia, con el paso de los años, se han especializado en el cultivo de ciruelas damascenas. "Las diferencias de precio entre el producto alemán y húngaro en estos momentos aún son relativamente grandes. En el pico de la temporada, pueden ser de alrededor de un 50%. Sin embargo, el producto de los Balcanes es el más barato. Esto significa que, inevitablemente, nosotros tenemos que bajar los precios para mantenernos competitivos".
Aparte de eso, según con Csaba, las demandas de la gran distribución alemana son un poco contradictorias. Sus clientes alemanes se interesan principalmente en las ciruelas damascenas con un diámetro de unos 32-40 mm. Después, por un lado, deben ser duras para que las pérdidas por magulladuras sean reducidas. "Pero, por el otro, los clientes prefieren la fruta que más dulce está. Y estos dos elementos son bastante difícil de combinar", lamenta Csaba.
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