Las nuevas restricciones impuestas por Rusia a 10 frigoríficos brasileños impulsa a los importadores a realizar consultas en otros destinos, incluido Uruguay, para completar parte de los cupos. Hubo repunte de precios para cargas de este mes.
A partir de la semana pasada, cuando el Servicio Federal de Supervisión Veterinaria y Fitosanitaria de Rusia (Rosselkhoznadzor), confirmó nuevas restricciones para exportar a 10 frigoríficos brasileños -dedicados a la carne bovina y uno al cerdo-, los importadores rusos comenzaron rondas de consultas con proveedores uruguayos.
Muchas de las consultas finalizaron en compras y los precios repuntaron para toda la carne que se pueda cargar este mes, pero no para la que se embarcará en noviembre; en muchos casos los valores igualaron a los precios que China paga por los mismos cortes de la rueda (delantero bovino).
El ritmo de consultas se mantiene estable esta semana, porque aparentemente, con las nuevas restricciones, quedaron sin definirse muchos contratos y las compañías rusas precisan cumplir con su parte de las cuotas, confirmaron a El País fuentes de la exportadora Mirasco International Food Merchants. Brasil ya comprometió su volumen de carne y los importadores rusos tuvieron que salir a comprar a otros abastecedores: Argentina, Uruguay y Paraguay.
Las nuevas restricciones parecen haberle dado a la línea de flotación de la exportación cárnica brasileña, porque abarca incluso a frigoríficos de los grandes grupos: seis plantas de JBS, dos de Minerva Foods, una de Marfrig y otra de BRF.
Entre todas manejan un gran volumen de carne que para muchos brokers(intermediarios) representa alrededor del 15% de la carne brasileña que compran los rusos. De las 56 plantas de carne bovina brasileñas que conforman el padrón de exportación a rusia, cinco están autorizadas a exportar, pero 42 quedan con restricciones temporarias, cuatro con controles reforzados y otras cinco esperan resultados de laboratorio de muestras de carne enfriada que fueron colectadas, según publicó BeefPoint.
Los importadores rusos aún no cuentan con el cambio de cuota y en muchos casos, no comprarán mayores volúmenes a otros abastecedores hasta que no se produzca el cambio.
Mientras tanto, el Ministerio de Agricultura, Pecuaria y Abastecimiento de Brasil (MAPA) enviará los documentos a Rusia la semana que viene buscando frenar las restricciones impuestas por las normas sanitarias de Rusia. Entre enero y agosto, Rusia fue el segundo mayor comprador de carne brasileña con 209.874 toneladas. Los valores de la carne brasileña y principalmente los volúmenes vendidos, habían dejado a los operadores uruguayos, momentáneamente, fuera de mercado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.