La vida útil de un alimento es el periodo en el que puede mantenerse en condiciones de almacenamiento especificadas sin que pierda su seguridad y calidad óptimas. La vida útil de un alimento empieza desde el momento en que se elabora y depende de muchos factores como el proceso de fabricación, el tipo de envasado, las condiciones de almacenamiento y los ingredientes.
¿Cómo se indica la vida útil en los alimentos?
La vida útil normalmente se indica en una etiqueta del alimento con información sobre la fecha de consumo máximo preferente o la fecha de caducidad.
La vida útil normalmente se indica en una etiqueta del alimento con información sobre la fecha de consumo máximo preferente o la fecha de caducidad.
- Una fecha de consumo máximo preferente refleja el periodo durante el cual cabe esperar, de forma razonable, que un alimento conserve su mejor calidad, como, por ejemplo, el sabor. Entre los alimentos que tienen una fecha de consumo máximo preferente se incluyen los alimentos enlatados, los deshidratados y los congelados.
- Una fecha de caducidad es el periodo durante el cual cabe esperar, de forma razonable, que un alimento resulte seguro para su consumo si se guarda respetando las condiciones de almacenamiento especificadas. Por lo tanto, estos alimentos pueden presentar un riesgo de intoxicación si se consumen después de la fecha de caducidad. Entre los alimentos que tienen fechas de caducidad se incluyen los productos lácteos refrigerados, las carnes cocinadas y las ensaladas preparadas.
¿Cómo se determina la vida útil?
Los fabricantes de productos alimenticios tienen la responsabilidad de determinar la vida útil y etiquetar sus productos consecuentemente. Esto incluye las condiciones de almacenamiento necesarias para cumplir con ese tiempo de vida útil, por ejemplo, especificando que se debe “guardar en la nevera una vez abierto”.
Los fabricantes de productos alimenticios tienen la responsabilidad de determinar la vida útil y etiquetar sus productos consecuentemente. Esto incluye las condiciones de almacenamiento necesarias para cumplir con ese tiempo de vida útil, por ejemplo, especificando que se debe “guardar en la nevera una vez abierto”.
Por lo general, la vida útil se define durante la elaboración de un alimento. Inicialmente, el fabricante determina las características (intrínsecas y extrínsecas) del alimento que afectan a su seguridad y/o calidad. Estas características incluyen los ingredientes utilizados, el proceso de elaboración, el tipo de envasado —como el envasado al vacío o el envasado en una atmósfera modificada, utilizados a veces para prolongar el tiempo de vida útil de un producto— y las condiciones de almacenamiento en las que se venderá el producto. Si es necesario, el fabricante también puede llevar a cabo otros estudios como tomas de muestras y análisis microbiológicos.
La determinación de la vida útil es una parte integral de los sistemas de control de seguridad de los alimentos que lleva a cabo el fabricante.1 Como parte de los exámenes periódicos de estos sistemas, el fabricante valida la vida útil. Esto es especialmente importante cuando se modifican los productos, las plantas de producción o los equipos de producción.
¿Qué requisitos legales existen para la vida útil?
La legislación europea clave relacionada con la vida útil es la Directiva 2000/13/CE sobre etiquetado, presentación y publicidad de los productos alimenticios, el Reglamento 1169/2011 sobre la información alimentaria facilitada al consumidor y el Reglamento 2073/2005 sobre criterios microbiológicos de los productos alimenticios.2,4
La legislación europea clave relacionada con la vida útil es la Directiva 2000/13/CE sobre etiquetado, presentación y publicidad de los productos alimenticios, el Reglamento 1169/2011 sobre la información alimentaria facilitada al consumidor y el Reglamento 2073/2005 sobre criterios microbiológicos de los productos alimenticios.2,4
La Directiva 2000/13/CE se refiere a la vida útil como la fecha de durabilidad mínima y la define como la fecha hasta la cual el alimento conserva sus propiedades específicas cuando se conserva adecuadamente.2 Esta legislación diferencia entre fecha de consumo máximo preferente y fecha de caducidad y describe algunos productos que están exentos del etiquetado de vida útil como el vino, la sal de cocina y el vinagre.2
El Reglamento 1169/2011 reemplazará a la Directiva 2000/13/CE en diciembre de 2014 y establece que la información como la fecha de durabilidad mínima o la fecha de caducidad deben facilitarse en un formato visible, legible e imborrable en el envasado del producto.2,3 Respecto a la carne congelada, los preparados cárnicos y los productos pesqueros sin procesar, el Reglamento también exige una indicación de la fecha de congelación, o la fecha de la primera congelación en los casos en los que el producto se haya congelado más de una vez, por ejemplo cuando se cortan grandes piezas de carne o pescado en pequeñas porciones para su venta. De acuerdo con este Reglamento, una vez se ha sobrepasado la fecha de caducidad, se considera que un alimento no es seguro para su consumo.3
El Reglamento 2073/2005 dicta criterios sobre combinaciones concretas de microorganismos y alimentos como, por ejemplo, la Listeria monocytogenes en alimentos listos para comer, y obliga a las empresas a realizar estudios, según sea necesario, para garantizar que no se exceden estos criterios durante la vida útil del alimento.4
¿Qué relevancia práctica tiene la vida útil para los consumidores?
El propósito de determinar la vida útil es ayudar a los consumidores a tomar decisiones seguras e informadas sobre los alimentos. La vida útil de los alimentos únicamente se debería considerar válida si el producto se compra intacto y sin daños. Los consumidores siempre deben respetar las instrucciones de los fabricantes respecto al almacenamiento, en especial las referentes a la temperatura y la utilización del producto una vez abierto. Asimismo, se recomienda que los consumidores tengan en cuenta la información sobre el tiempo de vida útil a la hora de comprar alimentos para evitar su desperdicio.5 Por ejemplo, a diferencia de los alimentos con fechas de caducidad, muchos alimentos con fechas de consumo máximo preferente se pueden consumir con seguridad incluso aunque se haya sobrepasado esta fecha.
El propósito de determinar la vida útil es ayudar a los consumidores a tomar decisiones seguras e informadas sobre los alimentos. La vida útil de los alimentos únicamente se debería considerar válida si el producto se compra intacto y sin daños. Los consumidores siempre deben respetar las instrucciones de los fabricantes respecto al almacenamiento, en especial las referentes a la temperatura y la utilización del producto una vez abierto. Asimismo, se recomienda que los consumidores tengan en cuenta la información sobre el tiempo de vida útil a la hora de comprar alimentos para evitar su desperdicio.5 Por ejemplo, a diferencia de los alimentos con fechas de caducidad, muchos alimentos con fechas de consumo máximo preferente se pueden consumir con seguridad incluso aunque se haya sobrepasado esta fecha.
Referencias
- EUFIC (2013). Normas de la industria alimentaria: la importancia del APPCC. EUFIC, Alimentación hoy en día núm. 85.
- Directiva 2000/13/CE del Parlamento Europeo y del Consejo de 20 de marzo de 2000 en materia de etiquetado, presentación y publicidad de los productos alimenticios.
- Reglamento (UE) 1169/2011 del Parlamento Europeo y del Consejo, de 25 de octubre de 2011, sobre la información alimentaria facilitada al consumidor.
- Reglamento 2073/2005/CE, de 15 de noviembre de 2005, relativo a los criterios microbiológicos aplicables a los productos alimenticios.
- Comisión Europea. Ficha informativa: ¿Qué puedo hacer en el día a día para limitar los residuos alimenticios?
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