Uruguay : Preocupa funcionamiento de algunas de las Codesas

La Federación Rural está preocupada por el funcionamiento de algunas Comisiones Departamentales de Salud Animal (Codesas). Planteó la necesidad de estimularlas para mejorar el trabajo y fortalecer su rol en el combate de las enfermedades

Las Comisiones Departamentales de Salud Animal (Codesas), donde están integrados los veterinarios oficiales, los privados y los productores, son el brazo ejecutor de la Comisión Nacional Honoraria de Salud Animal (Conhasa). Jugaron y juegan un rol fundamental en las campañas sanitarias, pues son las verdaderas conocedoras de la realidad departamental.

“Estamos preocupados por el funcionamiento de algunas de las Codesas. Es una herramienta fundamental para todos y no están funcionando como nos gustaría”, dijo a El País la doctora Patricia Mesa, delegada de la Federación Rural en la Comisión Nacional Honoraria de Sanidad Animal. La gremial ya hizo un planteo formal buscando delinear mecanismos que las estimulen a funcionar como lo hicieron en los tiempos de crisis sanitaria, como fue el caso de las dos epidemias de fiebre aftosa que padeció Uruguay (en 2000 y 2003).

Según la profesional, son muy pocos los departamentos donde funcionan bien las Codesas y mencionó a Florida, Paysandú y Soriano.

“Muchas veces no funcionan como deberían argumentando que el representante del MGAP no cita a las reuniones, pero no necesariamente debe ser él quien lo haga, puede dar ese paso el veterinario privado o el productor”, argumentó Mesa.

Otra de las justificaciones -siempre según argumentos de la profesional- se basan en que “existe poco vínculo entre las Codesas y la Conhasa”, pero la delegada de la Federación Rural aseguró que en los últimos dos años citó a reuniones y “a veces” obtuvo “muy poca respuesta”.

Desde su óptica, “habría que buscar una forma de reglamentar el funcionamiento y estimular más que en cada departamento exista una Codesa, una referencia”.

Imprescindible.

La preocupación cobra mayor fuerza porque se decidió ampliar el seguro contra la brucelosis bovina, asistiendo y apoyando a los productores interdictados y a los predios linderos a los focos, como una forma de estimular que los productores denuncien los focos y puedan sortear los problemas económicos que ocasiona el tener que sangrar sus rodeos y el no poder mover ganado.

Estos apoyos formaban parte de viejos reclamos de los productores rurales, que ahora, a través de sus delegados -una vez incluído en la Rendición de Cuentas- intentarán estar muy encima de la reglamentación.

“Algunas observaciones hicimos, pero vamos a estar muy arriba de cómo se va a reglamentar y cómo se va a instrumentar el pago a los productores, en todo lo que involucra el plan de saneamiento que incluye vacunaciones, honorario del veterinario, análisis de sangre y otras acciones”, dijo Mesa.

La brucelosis bovina continúa con una muy baja prevalencia y Uruguay quiere apuntar a una erradicación de la enfermedad, como lo hizo Estados Unidos.

Para la delegada de la Federación Rural en la Conhasa, “es el momento de tomar varias medidas drásticas y pisar el acelerador a fondo para poder identificar focos que todavía no se han identificado o aquellos que pueden quedar con la posibilidad de volver a ser focos, porque no se sangraron más”.

La propuesta de la gremial fue la de hacer dos años de sacrificio final y atacar a la enfermedad con todo, con más recursos humanos, económicos y haciendo a rajatabla los planes de saneamiento en los predios afectados.

“Estamos dispuestos a aumentar los sangrados, pero como contrapartida, el MGAP tiene que rever todos esos puntos críticos que manifiesta en el documento (se lo entregó a las gremiales el año pasado). Lo principal es contar con los recursos”, destacó la profesional.

La ampliación del seguro “puede ayudar a paliar lo caro que resulta para el productor el plan de saneamiento de su predio cuando es afectado, lo que falta ahora son los recursos humanos que ayuden a controlar todo eso, que es potestad del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca”, aclaró Mesa.

El documento planteando pasar a la fase de erradicación también ponía como uno de los puntos críticos la ampliación del seguro contra la brucelosis -hasta ahora se asistía al productor ayudándolo a reponer el ganado que debía mandar a faena obligatoria-, medida ampliamente apoyada por los productores ganaderos y sus gremiales, que así lo plantearon esta semana. El mes que viene habrá una reunión en Durazno.