La Comisión Nacional del Pequeño Escarabajo de las Colmenas (PEC) (Aethina tumida) elaboró un informe de las acciones desarrolladas durante el 2016 destinadas a evitar el impacto en la producción apícola que implicaría su ingreso en nuestro país, tras la ocurrencia de focos de esta plaga en el estado de San Pablo, Brasil.
Aethina tumida se ha convertido en una amenaza global para la apicultura, dado su alto poder de propagación; desde su ingreso a los Estados Unidos. En menos de 20 años cruzó a México, y siguió a El Salvador, Nicaragua y, recientemente, fue hallado en colmenas de Brasil.
La Comisión está integrada por profesionales y técnicos del Ministerio de Agroindustria de la Nación, del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) y del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA).
Este grupo busca sensibilizar al sector apícola nacional respecto de la amenaza que significa el PEC, establecer una estrategia de prevención unificada a nivel nacional y articulada regionalmente, para mitigar el riesgo de ingreso a nuestro país del escarabajo, generar la capacidad de detección temprana, establecer los procedimientos pertinentes en caso de confirmar su reporte, disminuir los daños que ocasionaría su presencia y controlar su eventual ingreso.
Cabe recordar que el 9 de junio de 2016 el Senasa declaró el alerta sanitario en la Argentina a través de su Resolución N° 302/2016, normativa que sentó las bases para establecer las acciones de prevención que el Organismo implementa en el territorio nacional, especialmente en las provincias de mayor riesgo, cercanas a la frontera con Brasil y Uruguay: Chaco, Formosa, Misiones, Corrientes y Entre Ríos.
Entre las medidas tomadas hasta la fecha figuran: el establecimiento de un procedimiento para la notificación y atención de sospechas, un plan de contingencia para implementar en caso de que el escarabajo sea detectado en nuestro país, una certificación complementaria a la fitosanitaria para importar fruta desde Brasil y, en las zonas de mayor riesgo, la identificación de 54 estaciones o sitios de monitoreo para establecer una red de vigilancia epidemiológica activa.
Asimismo, se hicieron prácticas demostrativas en apiarios respecto del procedimiento de monitoreo en colmenas para buscar la presencia del PEC; se brindaron capacitaciones a referentes y productores apícolas, agentes del Senasa, profesionales y técnicos provinciales y del INTA, y se llevó adelante una fuerte campaña de comunicación en distintos medios gráficos, radiales y televisivos.
Para que la Argentina preserve su estatus sanitario de país libre de la plaga se requiere de la colaboración de todo el sector apícola. En caso de detectar individuos compatibles con el PEC se solicita notificar el hallazgo a la oficina del Senasa, indicando la ubicación del colmenar sospechoso, y no movilizar las colmenas hasta que se descarte su presencia.
El cumplimiento efectivo de estas acciones permitirá el rápido accionar del Senasa y evitará graves perjuicios al sector apícola nacional.
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