El presidente del Centro Azucarero Regional de Tucumán (CART), Julio Colombres, aseguró que no es posible que los ingenios cubran un incremento salarial como el que solicitan los gremios, de entre un 35% y un 40%.
El empresario afirmó que las industrias no están en condiciones de afrontar ese reclamo salarial a raíz del déficit fabril. “Si se mira a los ingenios para saber cómo están, el panorama es muy feo. En estos momentos, el azúcar (en el mercado interno) vale $ 280 (la bolsa de 50 kilos), en promedio, cuando en 2011 el precio fue $ 210. Los costos subieron como mínimo 100% y el precio del azúcar se elevó alrededor de un 35%”, comparó el empresario para resaltar la diferencia negativa en la utilidad privada, en el inicio de la zafra azucarera.
Los gremios anunciaron un paro nacional para el lunes 2 de junio. Los trabajadores rechazaron el ofrecimiento de las industrias, en plena etapa de Conciliación Obligatoria que dictó el Ministerio de Trabajo de la Nación.
Juan Correa, secretario general de la Federación de Empleados de la Industria Azucarera (FEIA), uno de los gremios que participan en las negociación nacional, dijo el lunes que los empresarios propusieron un incremento de un 27%, sobre un haber de $ 4.803 para la categoría Uno. “Pero nosotros solicitamos una subra de entre un 35% y un 40% sobre un haber de $ 5.703 para el mismo nivel”, subrayó.
El sindicalista dejó en claro que los trabajadores reclamaron una mejora salarial, incluyendo los $ 900 no remunerativos que se abonaron hasta abril y que correspondieron al convenio anterior.
Colombres marcó su posición y su rechazo a la demanda de los obreros, sustentado en el actual escenario productivo azucarero.
La zafra en la provincia se retrasó y menos de la mitad de los 15 ingenios comenzaron con la molienda de azúcar, en la segunda mitad de este mes. La Providencia, Santa Rosa, La Trinidad y La Florida lanzaron ya sus planes industriales. Se esperan que en estas días otras plantas se sumen a la campaña.
“Hay bajo rendimiento y se están destrozando los campos, ya que los pisos están deshechos. Los camiones y las cosechadoras se entierran”, describió el titular del CART.
“No es prudente comenzar así. Representa un grado de dificultad económica. Se arranca en condiciones que no se deberían”, añadió el directivo.
Las lluvias registradas desde fines de marzo hasta el inicio de este mes, demoraron el inicio de la zafra -hubo pocos días de sol-.
En el sector prevén que el área cosechable será de alrededor de 265.000 hectáreas este año, una cantidad menor a la de 2013, que fue de 278.780 hectáreas.
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