sábado, 30 de marzo de 2013


Etchevehere dice que las bases piden “medidas de fuerza lo antes posible”

En Tucumán se llevó a cabo la quinta asamblea con una asistencia flaca de productores. El titular de la SRA reclamó la eliminación de controles del Estado en la actividad, y aseguró que las políticas económicas del gobierno “fracasaron”.
En la provincia de Tucumán se realizó la quinta asamblea planificada por las cuatro entidades de la Mesa de Enlace con una asistencia que rondó los 600 empresarios, según informó la Sociedad Rural Argentina (SRA).

El titular de la SRA, Luis Etchevehere, junto  a sus pares Eduardo Buzzi (FAA), Rubén Ferrero (CRA) y Carlos Garetto (Coninagro), reclamó la eliminación de controles e intervención por parte del Estado en el negocio agropecuario.

Con relación a las versiones periodísticas que indican que el Gobierno aplicaría la ley antiterrorista para obligar a los productores agrícolas a vender la cosecha de soja, el ruralismo calificó el hecho como “fascista”.

La potencial aplicación de la ley “es una práctica fascista” aseguró Etchevehere, y acusó a Cristina Kirchner de querer “concentrar todo el poder”, su gobierno “no admite crítica, oposición y quiere controlar todo lo que sea industria, comercio y producción”, aseveró.

Desde la AFIP, en tanto, desmintieron que se esté pensando en aplicar la ley antiterrorista. Su titular, Ricardo Echegaray, precisó que solo se aplicaría a los sojeros la ley penal tributaria en caso de que correspondiera.

El titular de la SRA reflexionó en Tucumán que “si las políticas oficiales fueran exitosas, el país se beneficiaría con una mayor producción y más puestos de trabajo pero a juzgar por los resultados, esas políticas fracasaron”.

“No podemos aceptar en este momento que se amenace a los productores porque la cosecha vieja se vendió prácticamente en su totalidad y la cosecha nueva está sin levantar”, explicó el dirigente ruralista. 

La misma AFIP en tanto informó acerca de un relevamiento realizado en enero mediante el cual contabilizó la existencia de unos 4,2 millones de toneladas de la oleaginosa.

Etchevehere instó también a no vender el grano, en cuyo caso se perjudicaría el financiamiento del Estado. “Estamos seguros de que este año los productores van a dosificar las ventas para poder mantener su poder adquisitivo hasta la próxima cosecha, tendrán mucha prudencia al momento de vender y van estudiar mucho cualquier compra e inversión antes de realizarlas”. 

El ruralista se quejó “de la política de intervención de los mercados, de precios máximos, la inflación, la presión fiscal, la pérdida de competitividad y el control a las importaciones”, mediante los cuales “el gobierno condiciona todas las actividades productivas del país”.

El ruralista anticipó medidas de fuerza desde abril al asegurar que en “la asamblea, los productores nos pidieron mantener la unidad de la Mesa de Enlace, no ir por separado a ninguna reunión con autoridades y solicitaron medidas de fuerza lo antes posible”.

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