La temporada de la coliflor francesa se ha desbaratado totalmente. "Debido a las circunstancias climáticas, estamos trabajando con variedades que estaban previstas para finales de diciembre", dice Theo Kampschoer, de Kampexport, en Saint-Pol-de-Léon, Francia. "Desafortunadamente no estamos obteniendo muchas ganancias todavía. Actualmente tenemos precios entre 5-6 euros por caja de seis coliflores, por lo que no es exactamente un lujo".
Cualquier recuperación del mercado será posible sólo si cambia el clima, según el exportador. "Si bajasen las temperaturas, podríamos aumentar los precios en 1 o 2 euros, pero por ahora, eso no va a suceder". España, e Italia en particular, no piden demasiado por sus coliflores, a pesar de que requieren mucho trabajo. Todos siguen trabajando con la coliflor de otoño, que necesita conservarse fresca".
"Los mayoristas hacen tratos con España e Italia, y a veces ni siquiera acuerdan un precio. La decisión es tomada por los mayoristas, e intentamos ajustarnos con nuestro sistema de subastas. Dedicamos mucho tiempo a rastrear y supervisar a nuestros productores. Cada envase de coliflor tiene una etiqueta GGN de cada productor, y todos colocan un código GGN de la subasta en sus envases, pero no se puede rastrear a los productores con ellos. Estos son requisitos de nuestros clientes, y nos los tomamos muy en serio. El sistema de subastas tampoco nos lo pone fácil".
Según Theo, se pueden obtener mejores precios con la lechuga de colores, la cual compra a grandes productores en el sur de Francia. La producción de este producto es buena. "Puede que no lleguen varios camiones a la vez, pero recibimos cada vez más palés de esta lechuga, que vendemos a nuestros destinos de exportación".
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