La importancia de estos conceptos es fundamental en el éxito de una explotación lechera y por consiguiente en el éxito de un programa de control de mastitis. El secado de la vaca lo podemos definir como el final de la lactación y la aplicación de un tratamiento preventivo para mastitis con el fin de garantizar […]
La importancia de estos conceptos es fundamental en el éxito de una explotación lechera y por consiguiente en el éxito de un programa de control de mastitis.
El secado de la vaca lo podemos definir como el final de la lactación y la aplicación de un tratamiento preventivo para mastitis con el fin de garantizar la salud de la glándula mamaria, lo cual da inicio al periodo seco.
El objetivo fundamental del periodo seco es tener el menor número de cuartos infectados en la siguiente lactación para asegurar una alta producción de leche. Este objetivo se consigue previniendo la aparición de nuevas infecciones y aumentando la tasa de curación de las infecciones presentes. Este periodo tiene como objetivo el garantizar el descanso de la glándula mamaria y la regeneración del tejido glandular productor de leche para preparar a la vaca para la siguiente lactancia.
El periodo seco es el tiempo de descanso y recuperación del tejido productor de leche en el cual debemos de poner especial atención, en los primeros días después de la aplicación de los tubos de secado a la vaca, en los cambios que se pudieran dar en la ubre, en la actitud y en la condición corporal de la vaca dichos cambios son indicativos de enfermedad o desórdenes en la alimentación y en la suplementación de minerales, estos desórdenes se deben de corregir lo más rápido posible.
La vaca lechera debe ser secada al cumplir los 7 meses de gestación, con una duración del periodo seco de aproximadamente de 60 días.
Se debe revisar todas las vacas 15 días antes de su fecha de secado, con prueba de california, (CMT) a las vacas con mastitis clínica se debe aplicar un tratamiento de acuerdo al resultado del análisis de laboratorio o en su caso al tipo de mastitis que se sospeche (a criterio del médico Veterinario). El día del secado a las vacas con mastitis subclínica grado 3 se les aplica un antibiótico de larga acción y un tubo intramamario.
Nunca secar vacas con mastitis clínica.
Fisiología del secado
Cumplir con los requisitos nutricionales y metabólicos es fundamental para que el período de transición sea normal (preparto, parto, post-parto inmediato) y de esta manera, el período de seca no sea mayor ni menor a la cantidad de días previamente señalados.
El cese del ordeño aumenta la presión de la ubre con lo que en la vaca se activa una serie de señales moleculares que inducen la activación de factores proteicos y hormonales que inician la involución activa de la glándula mamaria en el secado. La involución conlleva procesos de muerte celular y fagocita-citosis de restos de secreción de leche que favorecen la regeneración del tejido glandular mamario. Por otro lado, el estancamiento de la leche y la propia involución también refuerza la estimulación de la contracción del tejido secretor para que cese la síntesis de proteínas de la leche como son la caseína y la lactoalbúmina.
Etapas del secado
Desde el punto de vista de la fisiología de la ubre, el período seco puede dividirse en 3 etapas:
Involución activa: comienza con el cese de la extracción de la leche, y tiene una duración de 21 a 30 días después del secado, durante las dos primeras semanas, se absorbe la leche, se suprime la inmunidad y se instala la inmunidad pasiva.
Durante esta etapa los riesgos de infecciones de mastitis son muy altos debido a:
La producción diaria de leche promedios si es alta favorecen el la salida de gotas de leche o chorros, en los primeros días lo que retrasa la formación del tapón de queratina y en algunas vacas no se llega a formar.
La leche es un excelente medio de cultivo para las bacterias. Los leucocitos ingresan a la glándula después del día uno se ocupan principalmente de la ingestión de los componentes solidos de la leche y su actividad se ve afectada por la fagocitosis de grasa, caseína y desechos celulares como parte del proceso de absorción de la leche acumulada por la ubre; altos niveles de citrato bloquean el efecto protector de lactoferrina. La lactoferrina se une a los iones de hierro, lo que inhibe el crecimiento de bacterias.
Las barreras físicas para las bacterias que ingresan al canal de los pezones aún no son efectivas. Aún no se ha establecido un tapón de queratina efectivo y no hay un barrido de infecciones con la corriente de leche durante el ordeño.
Además, la vaca puede estar estresada debido a la reagrupación, el cambio de las rutinas diarias, la privación de alimento y un nuevo entorno. Los niveles altos de cortisol como resultado del estrés afectan el sistema inmunitario.
Estado estable: durante este estado, no hay involución, no hay producción de leche y las células epiteliales secretoras de leche se renuevan, la inmunidad contra infecciones intramamarias es muy alta y las condiciones de la glándula durante esta etapa no son favorables para el crecimiento bacteriano.
Formación de calostro: este período marca la transición de no lactante a lactante, por lo general dura 3 a 4 semanas antes del parto, el transporte selectivo de inmunoglobulinas es la función principal de las células epiteliales, se aumentan los principales componentes de la leche, es identificable por la secreción de leche o calostro.
En esta fase el riesgo de infección aumenta debido a los cambios fisiológicos que experimenta la glándula de preparación para la lactación.
Importancia del uso de registros de incidencia de mastitis
Una base de datos nos ayuda a ser más eficientes en los tratamientos y en la toma de decisiones en cuanto a qué hacer con la vaca, estos datos deben incluir:
Número de la vaca, tipo de mastitis que se sospecha, duración del tratamiento, tratamientos anteriores, medicamentos utilizados, resultados de análisis de laboratorio.
Principales causas de mastitis al secado
Al inicio del periodo seco la ubre es más susceptible a desarrollar mastitis; aproximadamente el 60% de los casos de mastitis que se presentan al inicio de la lactancia son originados por un incorrecto secado de la vaca es decir secamos a la vaca.
- Sin saber el tiempo de gestación.
- Sin revisión o sin aplicación de un tratamiento adecuado.
- Aplicación de jeringas intramarias de manera inadecuada y en condiciones poco higiénicas.
- Con Mastitis clínica y sin conocer el o los agentes patógenos presentes en el establo.
- Sin dar el seguimiento durante los siguientes días posteriores a la aplicación de las jeringas de secado.
- La alimentación y la suplementación de minerales es inadecuados de acuerdo a su etapa de producción.
- Las vacas secas se mandan a un corral en malas condiciones higiénicas por no estar produciendo leche y además se olvidan de ellas hasta poco antes del parto.
Como aplicar las jeringas de secado
1) Después de ordeñar a la vaca se comprueba que no le queda leche, realizando un estilado, es decir ordeñando a mano los remanentes de leche que pudiera traer la vaca.
2) Luego se procede a desinfectar los pezones especialmente las puntas con una toalla o una torunda con un desinfectante o antiséptico.
3) Aplicar las jeringas de secado poniendo especial atención en no contaminarla utilizando la inserción parcial de la cánula, siempre aplique la jeringas de secado primero a los cuartos más cercanos y luego a los más lejanos.
4) De un masaje a cada cuarto después de aplicar la jeringas de secado.
5) Proceda a aplicar un sellador de pezones que haya mostrado ser eficaz en el control de mastitis.
Después de aplicar las jeringas de secado a las vacas se procede a separarlas del corral de vacas en ordeña para evitar que se pueda prestar a confusiones y contaminación del tanque de leche con antibióticos.
Se debe mantener en observación a las vacas que se les aplicó la jeringa de secado para detectar cambios en su comportamiento y en las características de la ubre, revisando todos los días o por lo menos cada tercer día la presencia de alguna anormalidad y proceder a dar un tratamiento oportuno que favorezca la salud y bienestar de la vaca.
Tratamiento de secado
Objetivo de aplicar Cefalexina (benzatínica) 250 mg + Neomicina (sulfato) 250 mg, es prevenir mastitis clínica durante el periodo seco, curar infecciones subclínicas y obtener vacas más sanas y productivas.
Antes de secar a la vaca se debe realizar pruebas como Wisconsin, California o Cultivos bacteriológicos con el objetivo de conocer el estado de salud de la vaca estas pruebas es conveniente realizarlas 15 días antes de la fecha de secado (7 meses de gestación), esto nos da tiempo de tratar a las vacas con mastitis clínica o tomar mejores decisiones de que tratamiento debemos dar a la vaca.
Cuando tenemos el resultado de un cultivo Bacteriológico los tratamientos se eligen de acuerdo a los patógenos presentes en el establo o en su caso de cada vaca, cuando no se tiene un cultivo tenemos que enfocar nuestra atención en establecer un diagnóstico mediante los signos clínicos de la mastitis y establecer tratamientos a criterio del médico veterinario.
Programa de secado de las vacas
Seguir un protocolo Establecido para el rancho de acuerdo a la prevalencia mastitis.
Protocolo de salud de la ubre, a todas las vacas al secado aplicar Cefalexina (benzatínica) 250 mg + Neomicina (sulfato) 250 mg.
Vacas con mastitis sub clínica aplicar un antibiótico a base de estreptomicina con penicilina benzatínica (Shotapen LA) + Cefalexina (benzatínica) 250 mg + Neomicina (sulfato) 250 mg.
Vacas con antecedentes de mastitis recurrente aplicar, 3 días antes del secado Shotapen LA, el día del secado aplicar Shotapen LA + Cefalexina (benzatínica) 250 mg + Neomicina (sulfato) 250 mg, 3 días después del secado aplicar Shotapen LA; mantener las vacas en observación durante la primera semana después del secado.
No secar vacas con mastitis clínica, primero hay que tratar la mastitis.-