La producción nacional de carne de bovino, cerdo y ave continúa registrando cifras a la baja, y se proyecta que siga disminuyendo en los próximos años. Según un informe realizado por la Oficina de Estudios y Políticas Agrarias (Odepa), durante el período enero-agosto de 2017, se alcanzaron las 880.975 toneladas. Esta cifra representa una caída de 10,6% -esto, incluyendo la carne de hamburguesas- respecto al mismo lapso del año pasado. Del total de producción local, la carne de ave es el producto más importante, con un 51,6% de participación, seguido por la carne de cerdo, con una participación de 33%, y la carne de vacuno, con un 15,4%.
La carne de cerdo, a agosto de este año, fue el producto que registró la mayor baja. De acuerdo con el reporte, se alcanzaron las 290.842 toneladas, un 16,5% menos que lo cuantificado en igual ejercicio del año pasado. La carne de ave, en tanto, llegó a las 454.279 toneladas, es decir 7,4% menos que en el mismo período de 2016.
Según fuentes de la industria, la baja registrada en la producción de los dos productos anteriormente señalados, se debería a “temas sanitarios” que habrían afectado las distintas plantas.
Por su parte, el beneficio de ganado bovino acumulado a agosto registró una baja de 7% con respecto al mismo período del anterior, pasando de producir 146.142 toneladas y 593.243 cabezas faenadas en 2016, a 135.854 toneladas y 519 mil cabezas faenadas este año.
El gerente general de la Asociación de Plantas Faenadoras de Carnes (Faenacar), Rafael Lecaros, explicó que “en el vacuno, después de algunos años de liquidación de vacas, a mediados del 2016 se inició un nuevo ciclo ganadero, comenzando una etapa de retención de ganado, especialmente hembras, lo que sumado a la sostenida tendencia de disminución de masa ganadera en los últimos 20 años nos lleva a una situación indeseable de producción de carne chilena. No tenemos animales suficientes”.
A juicio del presidente de la Asociación Chilena de la Carne (Achic), Joaquín Abaroa, si bien las cifras van a la baja, su caída no sería tan abultada como lo muestran los datos de Odepa. “Existe un error en la cifra de cerdos del mes de agosto, situación que le hicimos saber a Odepa. A agosto 2016 se llegaron a las 920 mil toneladas de producción, aproximadamente, alcanzando una baja del 7% durante los primeros ocho meses del año. El cerdo y ave, en tanto, cayeron 5,7% y 7%, respectivamente, en el período”, aseguró.
Agregó que “la caída en la producción del vacuno es por el menor volumen de vacas a faena. Sabemos que hay menos ganado y que existe una retención de hembras (que se conservan para aumentar la población). Esto se refleja en el alza del precio del novillo gordo, que alcanzó un aumento cercano al 10% en lo que va del año y en el incremento del precio de la leche”.
Importaciones al alza
Las importaciones de carne en todas sus variedades, durante enero-agosto, alcanzaron las 306.636 toneladas (ver infografía). Esta cifra representa un crecimiento de 10,7%, en comparación con las toneladas compradas en igual ejercicio del año anterior.
El presidente de la Achic explicó que esta alza está impulsada por “un dólar más bajo, que favorece las internaciones y el aumento del precio interno de los productos”.
Consultados por las proyecciones para el cierre de este año y el próximo, en cuanto a producción e importaciones, ambos gremios señalaron que la tendencia se mantendría.
“La situación para el vacuno no se revertirá, ni este ni el próximo año, ya que el proceso de producción de ganado toma de dos a tres años, y cada ciclo lo estamos iniciando con menos ganado desde el 1995”, sostuvo Lecaros.
Abaroa indicó que la carne de cerdo y de ave podrían recuperar su producción, debido a que su reacción productiva es más rápida que la del vacuno. “En el total podrían compensar en parte la baja, pero ya se vería más el próximo año”, dijo.
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