“El Uruguay tiene 75 % de sus exportaciones de bienes provenientes de productos agropecuarios o agroindustriales, todos de base productiva agropecuaria y que vende a más de 152 mercados del mundo su carne, su leche, su madera, sus productos forestales, sus frutas y sus quesos”, señaló el titular del MGAP, Tabaré Aguerre.
El ministro utilizó esas palabras para contextualizar el acuerdo firmado este miércoles en Montevideo, que busca fortalecer las barreras sanitarias del país y proteger el estatus sanitario con el que cuenta la nación suramericana.
En este sentido, el titular de la cartera de Ganadería explicó que el país debe tener como un “aspecto estratégico”, relacionado a su economía y a su inserción internacional, la “política sanitaria”.
“No me canso de repetir que el acceso a los mercados es, antes que arancelario, sanitario”, apuntó.
Y agregó que el principal cometido de las barreras sanitarias es “proteger el estatus sanitario que un país tiene”.
Aguerre sostuvo que es importante fortalecer las barreras sanitarias del país dado el “impacto que podría tener en la actividad económica que una peste animal o una enfermedad vegetal” ingresara al territorio uruguayo.
En tanto, el ministro de Defensa Nacional, Jorge Menéndez, argumentó en rueda de prensa que su cartera realizará tareas de apoyo, mientras que la actividad central desde el punto de vista técnico estará a cargo de los funcionarios del MGAP.
De esta manera, el MDN -del que dependen las tres ramas de las Fuerzas Armadas (FF.AA.)- aportará 112 funcionarios que estarán “adiestrados, preparados y dotados de los elementos necesarios”, para fortalecer el control sanitario en las zonas fronterizas.
Estas 112 personas, que incluirán a personal de la Prefectura, del Ejército y de la Fuerza Aérea, llevarán adelante “tareas de apoyo”, vinculadas a los “controles, revisiones, inspecciones y detenciones”.
Según recordó Aguerre, está prohibido el ingreso de “materiales vegetales o materiales animales de origen animal que pudieran ser portadores de algún tipo de enfermedad, virus o bacteria”.
“La barrera sanitaria tiene como objetivo interceptar eso”, indicó.
Sin embargo, Aguerre resaltó que “la mejor barrera sanitaria” es la “conciencia” de los propios ciudadanos, quienes deben incorporar el “riesgo implícito que tiene la introducción de un vegetal o un producto animal que pudiera ser portador de algo lesivo para el trabajo de los uruguayos”.
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