La Paulownia spp. es el único género con especies arbóreas de la familia Scrophulariaceae, las cuales son por lo general herbáceas. Las 9 especies de este género son originarias de China, excepto P. fortunei y P. tomentosa que proceden de Vietnam y Japón, respectivamente. Las variedades más utilizadas son P. elongata, P. fortuneii y P. tomentosa.
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Sus características fisiológicas permiten a este árbol adaptarse a gran variedad de climas. El rango de temperaturas al que pueden adaptarse es muy amplio, desde -20 ºC hasta 45 ºC, aunque encuentran su rango óptimo para un buen desarrollo en altura y diámetro entre los 24 ºc y 29 ºC. Pueden lograr desarrollarse en zonas con una precipitación anual próxima a los 150 mm, haciéndose necesarios riegos estivales. Se adaptan a todo tipo de suelos, prefiriendo los suelos bien drenados y poco arcillosos, con un pH entre 5.5 y 8. Su porte es recto y con pocos nudos, lo cual la hace interesante para la industria maderera. Tras el corte se regenera de forma vigorosa hasta 7 veces.
Se trata de una especie caducifolia con una copa ancha y ramas de crecimiento horizontal con hojas de gran tamaño, color verde oscuro con forma ovalada y acorazonada.
A finales de los 70 se iniciaron trabajos de mejora genética que permitieron identificar la secuencia genética de todas las variedades para diseñar un nuevo híbrido. Una de las principales características del nuevo híbrido es su extraordinaria resistencia a plagas y enfermedades, su capacidad para no modificar su entorno y no afectar a otras especies con las que convive debido a que es un clon estéril que sólo se reproduce en el laboratorio.
Su principal valor industrial y comercial radica en su rápido crecimiento, mucho mayor que el alcanzado por otras especies, hecho que lo hace muy productivo y rentable. Entre otros beneficios, destaca la excelente calidad de su madera, su idoneidad para recuperar, controlar y estabilizar la erosión de los suelos debido a su profundo sistema radicular, su considerable capacidad de producción de biomasa y capacidad de fijación de CO2, posibilidad de aprovechamiento del follaje para el ganado, potencial uso para reforestaciones de terrenos agrarios abandonados y/o degradados, valor como planta ornamental, etc.
El cultivo de la paulownia puede ser orientado a la obtención de biomasa o a la producción de madera de excelente calidad, ambas dos muy rentables.
Cultivo de la Paulownia
Hay dos épocas de plantación idóneas primavera y principios de otoño, evitando siempre las heladas. Si plantamos en primavera tendremos el ciclo vegetativo completo antes del invierno lo que hará que haya un importante desarrollo de la planta. Sin embargo, si plantamos en otoño la planta dispondrá de un sistema radicular más desarrollado que favorecerá el desarrollo en la próxima primavera pero tenemos el inconveniente de que si hay heladas tempranas la planta tendrá poca protección frente a ellas al estar poco lignificada.
El riego es importante en los primeros 21 días tras la plantación para favorecer el enraizamiento, evitando el estrés hídrico. En los dos primeros años, cuando el sistema radicular no está totalmente desarrollado, es recomendable hacer riegos de mantenimiento.
La poda dependerá del destino final de la madera. De todas formas, será conveniente que la planta crezca con una tronco lo más grueso y recto posible, dejando ramas en los dos tercios superiores que permitirá un desarrollo más vigoroso.
En cuanto a plagas y enfermedades, los tratamientos son sólo necesarios en casos puntuales ya que presentan pocos problemas fitosanitarios.
Producción de biomasa
La biomasa como fuente de energía renovable presenta múltiples ventajas socioeconómicas y medioambientales:
• Es un combustible no fósil que no altera el equilibrio de la concentración de carbono atmosférico.• Su uso reduce las emisiones globales de CO2 al sustituir a otros combustibles fósiles.• Contribuye al desarrollo socioeconómico del medio rural.• Ayuda a la reforestación.• Es una actividad rentable para tierras agrícolas abandonadas.• Su contenido en azufre es prácticamente nulo por lo que su uso no causa lluvia ácida.• Permite reducir la dependencia energética.
Su principal inconveniente es que es necesaria más cantidad de biomasa que de combustible fósil para producir la misma cantidad de energía. Esto se traduce en un rendimiento más bajo que los combustibles fósiles cuando se utiliza en calderas.
A nivel mundial, la actual situación de costos derivados del petróleo junto con la problemática derivada de la producción de CO2 han llevado a las autoridades a tomar compromisos de potenciación de las energías renovables y, en particular, de la generación de biomasa con fines energéticos.
A nivel europeo, cada vez se incentivan más las actividades destinadas al uso de plantaciones y/o residuos forestales para la obtención de energía. España, por su parte, es altamente dependiente de los combustibles fósiles. Pese a que el aumento de las cuotas de las energías renovables ha llevado a España a ocupar el sexto lugar en la UE-27 en cuanto a producción de energía primaria a partir de biomasa sólida, sigue presentando una dependencia energética exterior de hasta el 80%.
Actualmente, el Plan de Energías Renovables (PER 2011-2020) tiene como principal objetivo que al menos un 20% de la energía final consumida y que, como mínimo, un 10% de la energía consumida en el sector transportes, sean renovables. En esto la biomasa puede contribuir de forma notable, tanto en el suministro eléctrico como en la biomasa térmica.
Contemplándose la producción de biomasa como una importante opción de negocio debido a la ubicación geográfica estratégica de España para su intercambio comercial con países de Europa septentrional, el norte de África y los países de América Latina.
La madera de la Paulownia
En Europa, actualmente, los bosques tienen una importante función social y medioambiental, mientras que su función económica es meramente anecdótica. Sin embargo, la industria de la madera necesita cada vez más el aprovisionamiento de madera de buena calidad.
En España, el consumo de productos de madera está en aumento y debe ser atendido en gran medida a través de las importaciones. Teniendo un déficit en la tasa de cobertura de la demanda nacional inferior al 50%.
Alrededor del 70% del suministro de madera procede de masas de Pinus pinaster, P. radiata y Eucaliptos sp.. En este ámbito la Paulownia es una excelente opción para rentabilizar las parcelas. Además sus características hacen que presente un gran potencial para el cultivo intensivo, crece tres veces más rápido que el P. radiata, pudiendo alcanzar en 5 años la misma altura y diámetro que el pino en 15 años.
La madera de esta especie es muy ligera y resistente, presenta un secado rápido, no se deforma con facilidad. Es muy maleable y presenta excelentes cualidades como aislante.
Es una madera muy utilizada para la fabricación de muebles, estructuras, instrumentos musicales, acabados en aviones, parqués, mobiliario de jardines, cubiertas de barcos, etc. El país con mayor demanda de esta madera es Japón. En Europa es una especie con grandes expectativas de éxito que se está introduciendo con gran facilidad en nuestros mercados.
Su cultivo para madera es también una clara apuesta por la rentabilidad en parcelas que no son aptas para otros cultivos que dan bajos rendimientos.
La madera es un bien escaso con una demanda creciente. En la actualidad, la demanda de madera noble de alta calidad se dispara para fabricar gran variedad de útiles, mobiliario, estructuras, etc. Debido a estos motivos y a la actual crisis que sufre el sector agrícola, plasmado en el abandono de parcelas, hace que se de un escenario ideal para comenzar a realizar plantaciones agroforestales de crecimiento rápido con Paulownia sp.
¿Habéis visto alguna plantación de paulownia? ¿Os parece una opción rentable para vuestras parcelas?
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