Proyecciones complicadas

El cuadro adjunto muestra la proyección de resultados para la zona Oeste de Buenos Aires, sobre la base de los precios estimados a cosecha 2015, para girasol, maíz, soja, y trigo. Se presentan las cifras para los cultivos realizados por administración en campo propio y bajo la forma de arrendamiento en campos de terceros.-

El cuadro adjunto muestra la proyección de resultados para la zona Oeste de Buenos Aires, sobre la base de los precios estimados a cosecha 2015, para girasol, maíz, soja, y trigo. Se presentan las cifras para los cultivos realizados por administración en campo propio y bajo la forma de arrendamiento en campos de terceros.

Los productores están poniendo la vista en la próxima campaña, aún con parte de la superficie de maíz y soja por cosechar, en función de los retrasos provocados por el clima húmedo. La campaña que termina arroja resultados magros en general, y con menos espalda financiera.

En las proyecciones a cosecha del cuadro adjunto, para siembras por administración en campo propio, los resultados de la secuencia trigo/soja 2ª no llenan el ojo. Sólo en los rindes más altos del rango llama la atención el resultado neto de la secuencia. El problema sigue estando en el trigo, por más que algún productor pueda superar los 31 qq/ha del rinde de indiferencia necesario para cubrir los costos totales, ya que no hay aún solución en vista para el mercado de exportación intervenido con cupos, que se suma al elevado peso de las retenciones.

El maíz en campo propio muestra proyecciones en línea con la secuencia trigo/soja para los rindes bajos, pero en el rango alto del rinde queda detrás de esta secuencia y de la soja de 1ª. El rinde de indiferencia para el maíz es de 68 qq/ha. La soja de 1ª muestra proyecciones interesantes en comparación con los demás cultivos. En este caso el rinde de indiferencia es de 23 qq/ha. El girasol está en línea con los resultados de maíz, pero requiere una inversión por hectárea mucho más baja. El rinde de indiferencia en este caso es de 17 qq/ha.

En campo arrendado, las proyecciones para los precios y costos expuestos muestran quebranto en trigo que es difícil de revertir con los resultados de la soja de 2ª. Todos los cultivos muestran quebranto para el rango bajo del rinde. Los rindes de indiferencia para cubrir costos totales en trigo son de 39 qq/ha, en soja de 2ª de 20 qq/ha, en maíz de 86 qq/ha, en girasol de 23 qq/ha, y en soja de 1ª de 29 qq/ha.

Con estas proyecciones son previsibles ajustes en los valores de arriendo. Además de bajas en el precio en quintales, también habrá modificaciones en la forma de pago, con una mayor proporción a cosecha, o bien un pago en quintales por adelantado y un plus a cosecha que surja de una tabla de porcentaje variable en función del rinde que se logre.

El trigo y el maíz corren con desventaja sobre la soja. La intervención vigente en el mercado de exportación, al eliminar la competencia entre la exportación y la molinería, termina afectando el precio FAS de mercado, que sufre descuentos sobre el precio de paridad de exportación, o FAS teórico. Esto se suma a la pesada carga de las retenciones. Es por ello que estos cereales requieren que se libere la exportación para la nueva campaña. De esta forma el mercado volverá a la normalidad. Con un mercado que funcione en forma previsible aumentará el área de estos cultivos, la producción y el saldo exportable, con el consecuente incremento en el ingreso de divisas. Este resultado puede verse en sólo 7 meses con el trigo. Corre el tiempo de descuento, porque el trigo ya está en época de siembra.

Ámbito Financiero