A la espera de un repunte en las cotizaciones (especialmente de la soja) y eventuales cambios en el mercado por parte del próximo gobierno, muchos productores argentinos optaron por guardar la cosecha. En ese escenario, el almacenaje en silobolsa se convirtió en una alternativa más que interesante.
Según coincidieron los principales referentes del rubro, la venta de bolsas plásticas alcanzó un nuevo récord durante la última campaña, con un incremento de hasta 30% respecto al ciclo anterior. En total, se comercializaron más de 200.000 bolsas, estimándose que el 40% de la producción nacional está guardada, según publicó Ámbito Financiaro.
“Se están empezando a utilizar bolsas más grandes, ya que al tener más capacidad, se reduce la demora que implica cambiar de una bolsa a otra, que lleva 30 minutos, aproximadamente”, remarcaron desde Ipesa, una de las marcas más conocidas en el segmento de bolsas para almacenaje de granos. Por su parte, en Plastar comentaron que se registró un incremento del 30% en las ventas; cifra que podría haber sido más alta, pero la empresa no pudo satisfacer la demanda.
Las bolsas plásticas tienen una capacidad de almacenamiento flexible a un costo competitivo y fácil de implementar, al tiempo que ofrecen una mejor logística de poscosecha, con menos pérdidas y la posibilidad de adaptarse fácilmente a programas de trazabilidad y segregación de granos.
Una bolsa plástica de 93 y 60 metros de largo (200 toneladas de capacidad) presenta un precio de mercado del orden de $ 4.000 (más IVA), por lo que un productor puede guardar 200 toneladas y pagar ese costo a la espera de mejores valores de mercado utilizando esta tecnología de almacenamiento
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.