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La campaña gruesa no fue la gran cosa. Ahora hay que incentivar al trigo y la cebada. Con respecto a la ganadería, se trata de un buen momento para hablar del feedlot. Muchos establecimientos criadores en este momento están destetando y los llevan a feedlot propios o de terceros.
Hay que tener cuidado porque, si bien la crianza de ese animal es importante, también lo es que se sigan haciendo las cosas bien en la nueva dieta y vida del animal, más hacinado. Se trata de tener en cuenta ciertos aspectos para que no se deprima demasiado, y hasta pueden morir en casos extremos.
Algunos consejos para el feedlotero: El animal debe ir a un corral amplio, que tenga más de 20 metros cuadrados por animal. Por lo menos, el animal debe estar un día tranquilo con la dieta de forraje. Luego, empezar de a poco a meterlo en la rutina del feedlot.
Hay que tener mucho espacio y agua. Otra cosa importante identificar los animales por su estado. Pueden tener buen estado y con una sanidad adecuada, o pueden venir animales en mal estado, con mucho viaje y una procedencia sanitaria que no conocemos.
Para ello, se usa un semáforo para identificar su estado. El verde implica buen estado y que se conoce la procedencia. Amarillo, estado regular; pueden ser animales muy corraleados en ferias o terneros muy chiquitos. Los animales en muy mal estado están en color rojo. Con esta diferencia, podemos aplicarle el plan sanitario correspondiente a cada uno.
Luego, hay que adaptar al animal al corral, y cumplir metódicamente todas las operaciones del mismo. Tanto el momento de sanidad y la entrega de la ración de comida tiene que ser metódica y cumplir ciertos horarios para que se sienta cómodo con un modo de vida. El animal es muy rutinario.
En cuanto a la comida, es importante que vaya haciendo de a poco la incorporación del grano. Para terminarlo, hacen falta alimentos muy energéticos, como maíz y sorgo. Sin embargo, no podemos darle de golpe mucho maíz porque nos produce acidosis. El animal viene con un rumen acostumbrado a fibras y, si pasamos a darle mucho almidón, va a bajarle el Ph y le va a enlentecer la rumia. Siempre hay que dejar algo de forraje y buscar de a poco la ecuación de cuánta fibra y cuánto grano. La acidosis nos muestra desórdenes de tipo digestivo en los que podemos ver diarrea o animales que no comen y están muy hinchados. Si vemos más de 3% de diarreas en total del lote, debemos aplicar una medida.
Por último, recordemos que tengan mucho espacio, sombra, que el alimento sea de más calidad y clasificar las tropas.
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