Campaña 2012/13: regular calidad del trigo en la región central del país La presente campaña se caracterizó por la presencia de granos chicos, chuzos y fusariosos en porcentajes variables dependiendo de las zonas, según concluye el informe del INTA Marcos Juárez

Campaña 2012/13: regular calidad del trigo en la región central del país |
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| La campaña 2012/13 se caracterizó por el marcado efecto del fenómeno de “El Niño” que se desarrolló con fuertes tormentas de viento, granizo y lluvias abundantes con un patrón muy por encima de los valores históricos. El año no ha sido bueno para el trigo ni para los cultivos alternativos como cebada, garbanzo, colza, lo que ha producido desánimo entre los productores.
Según la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, al 17/01/13, se dio por concluida la cosecha de trigo 2012/13 con un 100% de la superficie apta a nivel nacional de 3,36 Mha. Se estimó un área perdida de 240 mil hectáreas y el total sembrado fue de 3,6 Mha. El rinde promedio fue de 29,2 qq/ha, y la producción total fue de 9,805 millones de toneladas. La producción de esta campaña fue un 30% inferior al ciclo previo (2011/12, 14 MT). El Sudeste, Sudoeste y Centro de Buenos aportaron el 33% a la producción nacional (Muñoz, 2013). En la región central la recolección del trigo mostró rendimientos que fueron desde 15 a 40 qq/ha según lotes y zonas, ubicándose el promedio en 26,5 qq/ha. La calidad fue muy afectada por el bajo peso hectolítrico debido a la presencia de enfermedades, inclusive en lotes tratados (GEA-6/12/2012). Las enfermedades foliares fueron generalizadas y se acentuó la presencia de roya, mientras que se han detectado signos de fusariosis de la espiga (GEA-3/12/12). Sumado a esto se produjeron días nublados con baja radiación, heladas y golpe de calor de principios de noviembre, dando como consecuencia granos chicos que no completaron su llenado y la presencia de granos con fusarium en porcentajes variables, algunos particularmente altos. Todo esto afectó el rendimiento y la calidad comercial e industrial del grano, haciendo que los lotes rindieran mucho menos de lo esperado de acuerdo a la apariencia de los mismos. Cuando los granos fusariosos superan el 10% pueden afectar la calidad comercial e industrial del grano, con disminución del rendimiento de harina en la molienda y aumento del contenido de cenizas en grano y harina, afectando el olor y color blanco de la harina y la masa, que puede pasar a un tinte amarillento hasta grisáceo cuando los porcentajes son altos. Las características reológicas de las masas pueden variar con reducción de la fuerza panadera, pérdida de elasticidad, de absorción de agua y estabilidad de las masas (Tombetta et al, 1994).
El problema mayor del grano fusarioso es la presencia de toxinas, entre ellas la Deoxynivalenol (DON) que es más abundante en los trigos argentinos. Esta toxina se encuentra en los granos de cereales y en los alimentos a base de cereales. La concentración en los productos terminados se reduce bajo ciertas condiciones de proceso. El Fusarium se concentra en la perisferia del grano, en el salvado, por lo tanto con la molienda se disminuye aproximadamente un 40% la toxina en la harina y con la elaboración del pan otro 50% debido a la combinación de la pérdida de DON y a la dilución por los ingredientes de la receta. En galletitas la disminución es menor, estimada en un 30% (Voss and Snook, 2010). En años con presencia de esta enfermedad se debe ser cauteloso en el consumo de productos integrales. Como todos los años desde hace 26 años, el personal del Lab. de Calidad de Cereales y Oleaginosas del INTA de Marcos Juárez realiza un relevamiento en acopios y cooperativas de la región central del país para conocer la calidad del trigo de cada campaña. Se tomaron muestras en las principales localidades del sur de Santa Fe, sudeste de Córdoba y norte de la Pcia. de Buenos Aires que corresponden a la Subregión Triguera II N y en el centro-sur de la Pcia de Córdoba a la V N.
Materiales y métodosSe tomaron muestras en las principales localidades del sur de Santa Fe, sudeste de Córdoba y norte de la Pcia. de Buenos Aires que corresponden a la Subregión Triguera II Norte (IIN) y en el centro-sur de la Pcia de Córdoba de la Subregión V Norte (VN). En la presente campaña triguera se muestrearon 190.000 ton. Los análisis de calidad comercial e industrial se realizaron de acuerdo a las Normas Nacionales del Instituto Argentino de Normalización (IRAM, 2007) e internacionales de la Asociación Internacional de Ciencia y Tecnología de los Cereales (ICC, 2001) y de la Asociación Americana de Químicos Cerealeros (AACC, 1999). La viscosidad de los almidones se determinó con el Rapid Visco Analyzer (RVA) y el color de harina con un Colorímetro Minolta Chroma Meter CR-410.
Resultados La presente campaña se caracterizó por la presencia de granos chicos, chuzos y fusariosos en porcentajes variables dependiendo de las zonas. De acuerdo a los resultados obtenidos, el peso hectolítrico del conjunto general de la subregión II N se ubicó en 75,50 kg/hl, 3,2 puntos por debajo de la cosecha pasada, también disminuido por el lavado del grano por lluvias. En la subregión V N fue algo superior con 76,40 kg/hl pero 4,2 puntos por debajo de la cosecha anterior. El valor más bajo se obtuvo en Carcaraña y Las Junturas con 66,40 kg/hl y los más altos en Arenales con 81,80 kg/hl y Porteña con 80,00 kg/hl. El 21% de las muestras analizadas tuvieron peso hectolítrico menor a 73 kg/hl, encontrándose fuera del estándar de comercialización. El tamaño de grano dado por el Peso de 1000 granos fue de 30 g en todas las regiones evaluadas, índice de granos de tamaño chico y chuzos que no completaron adecuadamente su llenado y de granos dañados, con Fusarium, lo que afectaría el rendimiento harinero. El porcentaje de granos fusariosos fue de 4,7 % para la subregión II N y de 1,4% en la V N, con máximos de 10% y 11% en muy pocas muestras. Las cenizas en grano estuvieron algo altas por el menor tamaño de los granos, con 1,982% para la subregión II N y 2,049% para la V N. El porcentaje de proteína fue superior a las dos campañas anteriores con un promedio de 12,4% en la subregión II N y de 12,5% en la V N, superando a la base de comercialización del 11% en 1,4% y 1,5% respectivamente. Los mismos valores se observaron en la región del Sur de Santa Fe, Sudeste de Córdoba y Norte de la Pcia de Buenos Aires con máximos de 14% en Rojas y Carcarañá. El gluten directamente relacionado a la proteína, fue un 5% superior a la cosecha pasada, dando un promedio de 30,1% en la II N y 29,5% en la V N, valores muy buenos para la industria. Algunas muestras provenientes de Carcarañá, Marcos Juárez, Los Surgentes, San Jerónimo, Las Junturas y Freyre rondaron el 40%. El Falling Number fue de 413 seg. en la subregión II N y 390 seg. en la V N valores normales para granos sin problemas de brotado e índices de baja actividad alfa-amilasa en las harinas. El Zeleny Test fue de 47 cc en la subregion IIN y de 49 cc en la VN, valores índice de fuerza panadera intermedia y superiores a la cosecha anterior.
Los valores de tiempo de desarrollo del mixograma fueron altos, con 5,35 minutos para la región IIN y 5,65 min. para la VN. La viscosidad del almidón (RVA) de los trigos de la presente campaña fue inferior a la cosecha anterior, observándose que a mayor proteína disminuye la viscosidad por la presencia en el grano de mayor contenido de proteína en relación a almidón. Cuadro 1. Los alveogramas muestran a los trigos de estas regiones como de fuerza moderada, acorde a los niveles de proteína y gluten de la presente campaña. Los valores más altos se observaron en el Centro-Sur de la Pcia de Córdoba (V N) con un W= 290 y Sudeste de la Pcia. de Córdoba con W= 267 (259 cosecha anterior). La subregión IIN tuvo un W= 240 frente a W= 235 de la cos.11/12. Cuadro 1 y Fig. 1. El norte de la Pcia. de Buenos Aires presentó un valor de W de 254 (238 en la cos.11/12) y en el Sur de Santa Fe el W fue de 243. La relación tenacidad/extensibilidad (P/L) de las masas fue bajo en general índice de masas extensibles, siendo el P/L= 0,45 en la IIN y 0,59 en la VN. Esto ocurre en años con estrés calórico en llenado de grano. El índice de elasticidad del alveograma fue de 55,2 para las subregiones IIN y 57,6 en la VN, característica de masas flojas, muy elásticas. La absorción de agua farinográfica estuvo en 57,9% y 57,2% para las subregiones II N y V N respectivamente, con valores de estabilidad de las masas de 8,6 minutos en la II N y 13,1 en la V N, superior en esta última. Cuadro 1 y Fig. 2. La panificación se correspondió con el contenido de proteína y gluten, dando un volumen de pan de 730 cc en las subregiones II N y 750 cc en la V N, con valores de 100 unidades más altos que en la cosecha anterior.
ConclusionesLa calidad comercial de la presente campaña fue regular debido a la caída en el peso hectolítrico por la presencia de granos dañados por Fusarium, granos chicos, chuzos, con valores de proteína superior en un 1,5% y de gluten en un 5% a la cosecha 11/12, con fuerza panadera y estabilidad de las masas dentro de valores medios y esperable para la región central del país y para las condiciones ambientales que presentó esta cosecha triguera. En el estándar de comercialización, el grano fusarioso entra dentro del rubro dañados con una tolerancia del 1% para Grado 1, del 2% para Grado 2 y del 3% para Grado 3. Se recuerda a los productores que una adecuada fertilización nitrogenada mejora no solo el rendimiento sino también la calidad, haciendo que aumente el contenido de proteína y gluten, dando harinas con buen comportamiento en los productos panificados.
Informe de: Martha Cuniberti, Leticia Mir, Omar Berra y Susana Macagno. Lab. de Calidad industrial de Cereales y Oleaginosas. INTA Marcos Juárez, Cba. |
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